miércoles, 18 de julio de 2007

Estudio de Caso sobre el significado de la formación ciudada y su relación con las inteligencias múltiples.

ESTUDIO DE CASO ACERCA DEL SIGNIFICADO DE LA FORMACIÓN CIUDADANA Y SU RELACIÓN CON LAS MÚLTIPLES INTELIGENCIAS EN EL SER HUMANO: UNA APROXIMACIÓN DESDE LA INSTITUCIÓN FAMILIAR Y EDUCATIVA EN LA CIUDAD DE BARRANQUILLA.

Marco Antonio Turbay*
María Amarís Macías


Resumen

Toda cultura se asegura de que sus integrantes más jóvenes reciban, interpreten y apropien su legado. Las instituciones educativas y familiares han tenido como función principal la transmisión de la cultura. La socialización del individuo es uno de los principales desafíos en el desarrollo regional a corto, mediano y largo plazo, tan importante como la política, la economía y la ecología. Como pieza clave en este proceso se encuentra la formación de ciudadanía que equipara al ser con su condición de miembro de una sociedad y le proporciona a la persona las herramientas en términos del saber y de los principios de convivencia que lo elevan de su condición individualizante a la asimilación de una conciencia colectiva, a reconocerse un ser social con derechos y deberes dentro de la sociedad. En esta investigación se pretende describir los significados sobre la formación ciudadana que han construido un padre, su hija y un docente, privilegiando el uso de técnicas cualitativas para la recolección y análisis de la información. Para ello, se abordará el fenómeno por medio de un estudio de caso donde cada actor podrá desarrollar relatos desde los cuales se deconstruirá el significado de la formación ciudadana. Se privilegia, como es notorio, la tanto la técnica narrativa de Bruner como su concepto fundante de la psicología popular: significado; alterno a ello, será complementada dicha búsqueda por el concepto de inteligencia que desarrolla Gardner en su propuesta de las inteligencias múltiples.
Palabras claves: Ciudadanía, inteligencias, negociación, significado, comunidad educativa, enfoque liberalista, enfoque comunitarista.

Introducción

Los temas sobre los cuales versa esta investigación son de carácter nacionalista, por lo que nos interesó ahondar la construcción del significado del concepto de formación ciudadana, el cual implica abordar el concepto de ciudadanía. En la vida cotidiana este tema atraviesa todas las esferas, ya que la ciudadanía implica, bajo un contexto socio – constructivista desde el que se investiga, la capacidad que tiene el hombre de vivir socialmente, encontrando en la relación con los otros, un espacio de desarrollo personal.

La investigación fue realizada bajo un margen de investigación cuantitativo, aunque se utilizaron técnicas narrativas sustentas en Jerome Bruner; esto con el propósito de ser coherentes con el discurso epistemológico de la construcción del significado sobre el cual se genera la concepción que de ciudadanía se tenga.

A continuación se presentarán los argumentos que sustentan esta investigación. A su vez, se presentarán los objetivos que rigen la investigación, su metodología, la presentación del marco teórico con sus respectivos resultados y conclusiones.

Es necesario esclarecer que el concepto de formación ciudadana está interconectado con el de ciudadanía ya que las dos visiones que sobre el mismo se comprenden aseveran la presentación del concepto de formación como un proceso de participación desde la vida cotidiana. El concepto de ciudadanía, no es entendido únicamente desde esta visión dialéctica, sino que históricamente existe una visión que antecede esta perspectiva, y es el tradicional modelo liberal, que presenta el concepto de ciudadanía como un acto institucional por medio del cual los seres humanos nos socializamos. Es así, como ni la visión participativa desde la cual se forma el concepto de ciudadanía en el transcurrir de las interrelaciones cotidianas es el único, como que tampoco la visión institucional del concepto de ciudadanía – modelo liberal- es capaz de fagocitar cualquier formación del concepto por vía intelectual y/o de adaptación a la norma. En la siguiente investigación podremos ver esta diferencia, y sacarle provecho en el sentido estricto de lo académico, con el propósito de demostrar que tanto una visión como la otra están en constante interdependencia.


Justificación


Normalmente cuando hablamos de formación ciudadana nos situamos en la versión de que sustenta que esto únicamente tiene que ver con nuestros deberes y derechos frente a la elección de representatividad por medio del voto. Pero el ser o no ciudadano está en común relación con el ser buena persona o no serlo, buscar o no un bienestar social en mi medio social, en otras palabras, ser cívico o no. De acuerdo a ello, para ser ciudadano únicamente se exige vivir en sociedad, vivir con otros. Los modos como establezco los vínculos con quienes me rodeo definirán la manera cómo genero o perjudico el bienestar social, y esta búsqueda o negativa frente al bienestar social es producto, desde la postura constructivista, del significado que tenga de ello, el cual, como veremos más adelante, es producto de una negociación entre mi fuero interno y mi espacio cultural. Tema que como bien es sabido no es sólo de importancia local, sino mundial[1].

Si pensamos en la conveniencia que tiene esta investigación tendríamos que comenzar afirmando, al menos en palabras de Bárcena que “la vida en soledad, a pesar del juicio contrario que históricamente muchas veces ha merecido por los filósofos, sea una vida insuficiente y limitada”[2].

La investigación es funcional en los términos del reconocimiento que hace sobre dos elementos: el primero, el ser humano está en una constante interrelación con su medio, siendo ese espacio el lugar de intercambio a nivel tanto personal como social. Y el segundo, en consecuencia de lo anteriormente formado, el tema de la formación ciudadana traspasa las fronteras de lo jurídico que reduce la formación ciudadana en una acción dirigida a la búsqueda de una democracia representativa a través del voto. Es así, como afirmamos que el tema en mención tiene, de manera ineludible, una relación con la vida doméstica, con la vida cotidiana, con el paso a paso.

Respecto a la relevancia social de la investigación cabe anotar que su propósito es lograr percatar a quienes leen que las generaciones de esta época han puesto sus esperanzas del cambio en la formación que imparten las instituciones de la cultura: escuela, familia y con relación a esto José Luis Cordero[3] afirma que la educación de los ciudadanos es la base de las riquezas de las naciones.

Considerando entonces que uno de los caminos para superar las problemáticas de carácter social especialmente de los países latinoamericanos, es acabar con la ignorancia y educar a su gente, de forma que esté preparada para ‘crear’ y defender un futuro brillante. Sin embargo, en “los últimos años, las sociedades democráticas (...) han experimentado profundos cambios sociales, políticos y económicos que han originado la aparición de un ciudadano más individualista, que tiende a basar sus valores y comportamientos en elecciones personales (...)”[4].

De esta manera, en cuanto a las implicaciones prácticas que existen sobre el tema de la formación ciudadana involucra el establecimiento de una democracia participativa desde la cual se defiendan, desde los microespacios, las diferencias de cada uno de los integrantes de la sociedad. El interés por este tema insta a la disciplina de la psicología a un discurso pluridisciplinaria desde el cual se hace necesario rescatar el valor del concepto de ciudadanía[5]. Así que el no atender a estas temáticas es hacer que se funde, en palabras de Garay, el imperio de la violencia como único instrumento de movilización social[6]. La formación ciudadana, por tanto, involucra los espacios domésticos desde los que se penetra la relación persona – persona y posibilita que el discurso de lo político tome sentido en la vida cotidiana.

Los beneficiados de la educación son, entonces, las personas de la calle, el hombre que maneja bus, la mujer que hace de madre y padre al tiempo, el niño que trabaja, la prostituta que busca cumplir su rol de madre buscando cambiar su historia a través de su hija, el ejecutivo, el soltero, el rico y el pobre, entre otros. Son, pues, estos espacios urbanos en los que se hace vital una investigación de este tipo, ya que nos dispone un aparato metodológico para la construcción de espacios donde la búsqueda del bienestar social se nos convierta en una prioridad.

La investigación, per se, no es una solución inmediata, ni su propósito es ese. Sin embargo, la investigación es una acción que tiene su fin en una manera de afectar un espacio social. En el caso particular, un padre, un joven que hace las veces de hijo y estudiante y la rectora del Colegio Golda Meir de Barranquilla, ubicado en el Sur – Occidente de Barranquilla. Sabemos que el objetivo de la educación no es solo enseñar conocimientos a las nuevas generaciones sino también guiar el proceso de apropiación de pautas culturales, reflexionar críticamente, descubrir o redescubrir experiencias, a transferir lo aprendido y a integrarlo a su realidad para fortalecerla y mejorarla. Bruner plantea que a educación y la manera como esta se realiza, determina el equipamiento de las mentes en relación a las habilidades para entender, sentir y actuar en el mundo.[7]

Continuando con las ideas de Lamus[8] tanto la familia, como el sistema educativo colombiano, tienen la responsabilidad social de formar ciudadanos con una concepción de educación moderna, civilista, tolerante. “Ser ciudadano autónomo en una sociedad de tantas diferencias y conflictos, sólo se logra mediante la comprensión y el respeto a las ideas y a los estilos de vida. Por consiguiente, es urgente la formación en la concertación, la negociación, la capacidad de ceder a favor de propósitos y fines del bien común y de un orden realmente democrático”.

Alternamente, el valor teórico de la investigación se funda en la idea de Bárcena cuando afirma que hoy día las disciplinas que se involucran en el tema de la formación ciudadana deben configurar lo que el denomina una ciencia del ser humano. En sus palabras:

“(...) es necesario profundizar en el sentido de una <> capaz de articular las diferencias y encontrar un espacio público en lo diverso, lo plural o lo multicultural, es algo que nadie niega, o casi nadie. E l problema estriba en saber si ese espacio público (...) debe formularse mirando más hacia un discurso del pluralismo o a un discurso de la comunidad”[9].

Este espacio público al cual hace mención Bárcena tiene que ver con los encuentros que en la vida cotidiana son el fondo de toda convivencia social. Sin embargo, estos encuentros se dan en la acción, mediatizados por un proceso de construcción social. El concepto que Bruner desarrolla como pilar de su psicología popular: significado, nos permite valorar el modo cómo, desde esta disciplina, el ser humano interacciona con la realidad, siendo producto de ella, las representaciones que sobre su entorno tiene.

Bruner, como profundizaremos más adelante, habla de una ‘convivencia civilizada’, como la utopía hacia la cual todo sistema educativo debe apostarle en la formación del hombre del mañana. Esta idea de hombre, implica la formación del ciudadano que nos menciona Bárcena, el cual, para Bruner se caracteriza por desarrollar una “voluntad de negociar” [10] las diferencias, en las cuales reconoce su espacio potencial de crecimiento y desarrollo personal.

Por último, la utilidad metodológica de esta investigación nos brinda la posibilidad como afirmábamos en el párrafo anterior, de crear instrumentos que permitan emerger como posibles de estudios, temas como el de la formación ciudadana, y que a su vez, se dejen ventanas y puertas abiertas para su vinculación con otras disciplinas. Es hacer de la variable de significado de Bruner, también, una oportunidad de búsqueda de aquello que permite estudiar la tensión entre individuo – sociedad, ya que dicha variable es un producto de la interacción entre ambos, pudiendo así estudiar el espacio de encuentro, más que la posición específica de los participantes.

De este modo, el estudio de esta variable permite desde sí y para sí el reconocimiento a nivel de la psicología constructivista, de que existen dos mentes en constante negociación: la interior y la exterior, siendo la interior tan significativa como la que sobre los hechos se apoya. Ahora, la variable en relación a otras, como la representación social de Moscovici puede encontrarse a futuro un vínculo entre ambas y una diferenciación en lo que a procesos y esquemas grupales y mentales se refiere, otorgando un paso significativo a los procesos cualitativos que con dicha investigación se pretende favorecer, en esquemas mixtos como lo propone a nuestros contextos Ignacio Martín – Baró, Elsy Bonilla, entre otros.

Será pues, el estado intencional y el carácter canónico de la cultura los dos elementos estructurales de toda relación, pero posibilitados en confrontarse el uno al otro, siendo producto de tal encuentro el significado de los grupos y las personas que participan activamente en su construcción y, paralela, internalización.


Marco teórico

El interés por el concepto de ciudadanía ha experimentado en los últimos años una verdadera explosión. A fines de la década de los 70’s era posible afirmar con Van Gunsteren que “el concepto de ciudadanía ha pasado de moda entre los pensadores políticos”, luego de 20 años el concepto ha vuelto a la palestra política en gloria y majestad.

En Latinoamérica el concepto de ciudadanía ha cobrado vigencia social, tras la crisis de la soberanía nacional.

EL rol de las instituciones (familia, escuela) en la formación de las virtudes y responsabilidades ciudadanas, es entre otras el de formar y desarrollar la facultad de imaginar, negociar, evaluar, proponer.

El concepto ciudadanía debe necesariamente definirse o re-definirse de acuerdo a los contextos históricos y situacionales desde donde es entendido.

Así, entendemos por ciudadanía a un asunto de estrategia política por excelencia, cuyos contenidos son definidos por procesos de construcción democrática e histórica, que denotan a su vez, aspectos éticos, morales, económicos y comunicativos en su constitución y que se construyen y re-construyen en un proceso de interacción mediada e intersubjetiva.

A modo de síntesis, pensamos que el ejercicio de la ciudadanía, o participación ciudadana, implica algunas condiciones: la fundamental es que se pertenezca a una comunidad política, esta pertenencia puede ser activa o pasiva; como segunda condición que existan mecanismos e instituciones con el fin de regular, articular, concretar y negociar la diversidad de intereses presentes en la sociedad; una tercera condición es la conciencia y determinación de la comunidad de una participación libre y consciente de los derechos y deberes de esta condición, éstos serán capaces de poner en juego sus intereses y demandas y, sobre todo dispuestos s ejercer influencia en las decisiones públicas que derivan de estos espacios; un cuarto elemento es la vigencia de un espacio público de interacción en el cual se validen los diferentes intereses presentes en la sociedad.


Capítulo I: Bruner: su propuesta cognitiva y culturalista y su relación con la formación ciudadana

Bruner (1991), muy claramente plantea la importancia de descubrir los significados que los seres humanos crean a partir de sus encuentros con el mundo para luego proponer hipótesis, y construir la realidad y la necesidad de centrarse en las actividades simbólicas empleadas por los seres humanos para dar sentido no solo al mundo sino a sí mismos.

El significado no sólo abarca los aspectos cognitivos sino también actitudes, valores, emociones, sensibilidad estética, acciones y todo tipo de connotaciones socio afectivas y culturales

El significado es un acto simbólico con un propósito predefinido, propio de una construcción narrativa en interacción con el contexto de pertenencia desde el cual organiza la experiencia, el conocimiento y las transacciones que se tienen con el mundo social –elementos canónicos-, desde los propios estados intencionales – creencias y deseos – con el objetivo de resumir cómo son las cosas, cómo deberían ser, anticipar, juzgar y extraer conclusiones sobre el valor de la propia forma de vida o compromiso.


Capítulo II: El tema de la formación ciudadana y la convivencia civilizada

Cuando sobre el tema de formación ciudadana toma lugar en contextos teóricos, se hace necesario reconocer los dos grandes enfoques sobre los que se sustenta el tema de la ciudadanía: el liberalista y el comunitarista. En palabras de Lechner:

“La invocación de la sociedad civil significa una interpelación de nuevos actores sociales. Podemos distinguir dos perspectivas. El enfoque liberalista, más que liberal, festeja la modernización como una revolución silenciosa que libera la iniciativa privada de la tutela estatal y que ofrece a la libertad individual todas las oportunidades de creatividad. Incluso la informalización de la actividad económica es vista como un potencial de desarrollo empresarial. Fortalecer a la sociedad civil significa, según esta interpretación, hacer de la empresa privada el motor del desarrollo social. Desde un punto de vista opuesto, podríamos denominarlo comunitarista, la invocación de la sociedad civil apunta a los nuevos movimientos sociales”.

Desde el modelo liberalista es la institución la única capaz de movilizar la conciencia de los individuos que conforman las masas, ya que atribuyen a la imposición moral la capacidad de persuadir a todo individuo si se le desarrolla el argumento más persuasivo. (Bárcena)

Por otra parte, la perspectiva comunitarista defiende la tesis de que la actividad social se promueve desde los espacios cotidianos donde los seres humanos conviven, reconstruyendo con sus actos lo que el concepto liberalista da por sentado. Es por ello que la ciudadanía lleva a la civilidad, al arte justamente de relacionarse con quienes convivo. (Bárcena)

Desde Bruner se habla de ‘convivencia civilizada’, definida esta como la utopía hacia la cual todo sistema educativo debe apostarle en la formación del hombre del mañana. Esta idea de hombre, implica la formación del ciudadano que nos menciona Bárcena, el cual, para Bruner se caracteriza por desarrollar una “voluntad de negociar”[11] las diferencias, en las cuales reconoce su espacio potencial de crecimiento y desarrollo personal.

Ahora bien, podríamos llegar a un punto de comunión afirmando que la formación ciudadana es una construcción social que se configura entre la tradición y la vida cotidiana, desde el cual se forma el carácter del ser humano reconstituyendo constantemente tanto sus pensamientos, percepciones, capacidades de elección como sus juicios, creencias, sentimientos, valoraciones y, sobre todo, sus prácticas personales acerca de la vida en comunidad desde la que se reconoce el derecho a la diferencia y se compromete con mantenerlo, permitiendo así el surgimiento de una identidad personal de tipo social donde la realización personal es propia del bienestar que procure en mi convivencia cotidiana y mi capacidad de llegar a consensos que promuevan espacios democráticos.


Capítulo III: Gardner y su propuesta de las inteligencias múltiples y su relación con la formación ciudadana

El tema de las inteligencias múltiples en la teoría de Gardner se encuentra en relacionado con la variable de significado de Bruner. Estos dos conceptos, además de epistemológicamente remontarse a las ciencias del espíritu o de la cultura de Wilhem Dilthey, y más contemporáneamente, al interaccionismo simbólico de Ernest Cassirer se implican mutuamente, dentro del contexto de la formación ciudadana.

Para ejercer hablar de ciudadanía activa, de carácter comunitarista como se nos planteaba unos párrafos atrás, y superar el enfoque liberalista que nos hace ‘mendigos de patria’ y, en consecuencia, pasivos frente a las decisiones de la vida cotidiana, se requiere la educación. Esta educación desde Bruner se concibe en el proyecto kantiano de generar oportunidades, donde con sus propias palabras se reconoce que el ‘conocimiento es poder’, mas dista mucho de su antropovisión, en cuanto a que la categorización debe eminentemente ser racional, por cuanto a que esto además de desnaturalizar al ser humano, le castra una de sus más grandes potencialidades: crear símbolos, inventarlos, rompiendo los cánones tradicionales. Es así, como la propuesta de Howard Gardner nos permite encontrar la estrategia educativa que haga posible la idea de democracia para una ciudadanía participativa. Esta propuesta, además de definir a un ser humano capaz de construir símbolos, es un ser humano que se vincula con el mundo no sólo por su competencia cognitiva, sino cultural, artística, permitiendo así ver en su desempeño civil la posibilidad de diferentes perspectivas de valorar y aportar a la vida cotidiana que abran paso a diversos espacios de vinculación socio cultural, política, económica entre otros; valorando la diversidad, se hace posible, entonces, la democracia, y un ejercicio ciudadano.

La manera como define la inteligencia Howard Gardner es:

“Una inteligencia implica la habilidad necesaria para resolver problemas o para elaborar productos que son importantes para un contexto cultural o comunidad determinada”. Esto, según el autor implica:

• La capacidad para resolver problemas permite definir un objetivo y el camino adecuado para alcanzarlo
• La creación de un producto cultural es importante para la transferencia de conocimiento, opiniones y sentimientos.
• Los problemas a resolver van desde lo simple a lo complejo.
• Los productos van desde teorías científicas hasta las campañas políticas.

Objetivo General

Describir el significado de formación ciudadana que ha construido un padre, su hija y un docente y la relación existente en sus relatos del ejercicio y la formación de las inteligencias múltiples en un Colegio del sur-occidente de la ciudad de Barranquilla.



Objetivos específicos

1. Conocer el significado de la formación ciudadana para los estudiantes, y sus instituciones tanto familiar como educativa, con base en:
2.

- Referente culturales
- Símbolos
- Sentido
- Estados intencionales

2. Comparar el significado que de formación ciudadana existe entre los estudiantes, y sus instituciones tanto educativa como familiar.


3.
Identificar en el significado que de formación ciudadana tiene el padre, el estudiante y el docente, las inteligencias requeridas para la formación y el ejercicio de la ciudadanía.



Definición de las variables

La variable de estudio es el concepto de significado de Bruner dentro de la formación de la ciudadanía. Para ello vamos a definir ambos conceptos por aparte, y conjugaré una construcción para ambos a posteriori. Luego de ello se definirá la variable inteligencia de Gardner que se observará su incidencia, sea explícita o implícita, en las narrativas reconstruidas, y sus respectivas acepciones

Bruner elabora su concepto desde una disciplina denominada por él mismo como psicología popular. Para entender el concepto de significado es necesario conocer el de psicología popular, siendo la variable de estudio en cuestión, el objeto de estudio de esta disciplina[12].

En su texto Actos de significado no establece un lugar único en el que diríamos que se encuentra la definición precisa de la variable, pero en su transcurso va haciendo aproximaciones, de las cuales he construido la siguiente:

El significado es un acto simbólico con un propósito predefinido, propio de una construcción narrativa en interacción con el contexto de pertenencia desde el cual organiza la experiencia, el conocimiento y las transacciones que se tienen con el mundo social, desde los propios estados intencionales – creencias y deseos – con el objetivo de resumir cómo son las cosas, cómo deberían ser, anticipar, juzgar y extraer conclusiones sobre el valor de la propia forma de vida o compromiso.

El concepto de formación ciudadana no se escapa de la complejidad por cuanto a que pertenece al ideario de la psicología popular por su construcción. Sin embargo, este concepto no hará falta operacionalizarlo, más si definirlo, para lo que seguiré el mismo proceso que con Bruner se realizó. Partamos de una breve reflexión de las siguientes citas:

“La ciudadanía es un frágil, y al mismo tiempo, noble mito. Una parte de nuestra herencia clásica (...) Pero al mismo tiempo, hemos roto el hilo con el origen – con la verdad originaria- de esa tradición”[13].

“Se trata de formas de pensamiento, creencias, sentimientos, valoraciones (...) y de prácticas que, generación tras generación, han ido elaborando y entregando las generaciones adultas a las nuevas generaciones como ayuda para que éstas puedan instalarse en la vida que van a vivir” [14].

Desde Bruner la ciudadanía es valorada como el garante de una convivencia civilizada, y puede ser definida la ciudadanía como:

“(...) la voluntad de negociar nuestras diferencias en la manera de ver el mundo” p. 43.

Así podríamos llegar a un punto de comunión afirmando que la formación ciudadana implica una construcción social que se configura entre la tradición y la vida cotidiana, desde el cual se forma el carácter del ser humano reconstituyendo constantemente tanto sus pensamientos, percepciones, capacidades de elección como sus juicios, creencias, sentimientos, valoraciones y, sobre todo, sus prácticas personales acerca de la vida en comunidad desde la que se reconoce el derecho a la diferencia y se compromete con mantenerlo, permitiendo así el surgimiento de una identidad personal de tipo social donde la realización personal es propia del bienestar que procure en mi convivencia cotidiana y mi capacidad de llegar a consensos que promuevan espacios democráticos.


Y por último, cuando llegamos al concepto de inteligencia, se hace necesario remontarnos al interaccionismo simbólico planteado por Ernest Cassirer, quien nos sintetiza la contemporaneidad de la antropología filosófica, definiéndonos al hombre ‘como un ser simbólico’, como no sólo un ‘intérprete de símbolos’, sino un ‘creador de símbolos’. Desde esta perspectiva Howard Gardner, psicólogo investigador prestigioso de Oxford, nos replantea desde una acuciosa revisión histórica, el concepto en cuestión, el de inteligencia, así:

“Una inteligencia implica la habilidad necesaria para resolver problemas o para elaborar productos que son importantes para un contexto cultural o comunidad determinada” [15]

“He postulado que todos los seres humanos son capaces de conocer el mundo de siete modos diferentes, y que en algún lugar, he titulado las siete inteligencias humanas. Según este análisis, todos somos capaces de conocer el mundo a través del lenguaje, del análisis lógico – matemático, de la representación espacial, del pensamiento musical, del uso del cuerpo para resolver problemas o hacer cosas, de una comprensión de los demás individuos y de una comprensión de nosotros mismos. Donde los individuos se diferencian es en la intensidad de estas inteligencias (...) y en las formas en que se recurre a esas mismas inteligencias y se las combina para llevar a cabo diferentes labores, para solucionar problemas diversos y progresar en distintos ámbitos” [16].




METODOLOGÍA


Tipo de investigación

Dada la naturaleza del problema y los objetivos planteados la presente investigación pretende describir los significados sobre la formación ciudadana que han construido las instituciones familiar y educativa. Por lo tanto, la investigación es de tipo cuantitativa, o como le prefiere llamar Sampieri, científica por lo que es “sistemática, controlada, empírica y crítica (...) sistemática y controlada implica que (...) no se dejan los hecho a la casualidad. Empírica significa que se basa en fenómenos observables de la realidad. Y crítica (...) que se juzga constantemente de manera objetiva y se eliminan las preferencias personales y los juicios de valor”[17]

Esto la hace un estudio de casos con corte cuantitativo, pero el uso de herramientas cualitativas como la narrativa y la entrevista apoyarán el proceso de recolección y el análisis de la información tanto por la dimensión de la variable, como por el sustento epistemológico en el que fue creada.

El Tipo de Diseño
El diseño de la investigación es descriptivo ya que se pretende “(...) Describir situaciones y eventos. Esto es, decir cómo es y cómo se manifiesta determinado fenómeno. (...) Buscan especificar las propiedades importantes de personas, grupos, comunidades o cualquier otro fenómeno que sea sometido a análisis (...)”[18] bajo un marco teórico predefinido sobre el significado dela formación ciudadana y su relación con las múltiples inteligencias[19].

Estos estudios “(...) miden de manera más bien independiente los conceptos o variables a los que se refieren. (...) pueden integrar las mediciones de cada una de dichas variables para decir cómo es y cómo se manifiesta el fenómeno de interés, su objetivo no es indicar cómo se relacionan las variables medidas” [20].

Los Sujetos

Los sujetos que se utilizarán para este estudio de caso será un padre que conviva la mayor parte del tiempo con el sujeto y/o sea significativo en el proceso de socialización de su hijo, y sea reconocido mínimo por éste como tal. Su hijo, que de pueda dar cuenta desde su vida cotidiana, a través de una narrativa fluida de su formación ciudadana. Y, por último, se escogerá a un docente de tradición en la institución, y un estudiante, hijo del padre escogido.
Muestra

Por las condiciones del estudio el tipo será muestra no probabilística ya que se “requiere no tanto una “representatividad de elementos de una población, sino una cuidadosa y controlada elección de sujetos con ciertas características especificadas previamente (…)”[21]. El tipo interno de esta muestra será de sujetos – tipo ya que el “objetivo es analizar los valores, ritos y significados de un determinado grupo social”[22], ya que nuestra variable de estudio – significado de Bruner – lo requiere.

La(s) técnica(s)

Se utilizarán las siguientes técnicas cualitativas con el propósito de describir de manera fiel la variable significado de esta investigación. La primera, entrevista abierta tiene como propósito recoger el relato de los sujetos participantes que a través de la técnica de la narrativa de Bruner, se hizo pertinente para la recolección de información a modo de relatos que fueran susceptibles posterior interpretación.

“(...) La entrevista cualitativa se encuentra a medio camino entre la conversación cotidiana y la entrevista formal. Se trata de una conversación con un alto grado de institucionalización y artificiosidad, debido a que su fin o intencionalidad planeada determina el curso de la interacción en términos de un objetivo externamente prefijado. No obstante, al permitir la expansión narrativa de los sujetos, se desenvuelve como una conversación cotidiana, “una actividad cuya naturalidad hace quizás imperceptible su importancia donde el sujeto, a partir de relatos personales (...)”[23]

La técnica que se escogió con el propósito de corresponder a la exigencia del modelo cuantitativo y a la correcta interpretación del mismo, fue el análisis de contenido. Esta técnica consiste en un ‘conjunto de métodos y técnicas que tienen como objetivo establecer sistemáticamente las relaciones entre la superficie (el nivel sintáctico) de hábeas expresivos (…) y sus funciones comunicativas, tanto semánticas como pragmáticas“[24].

Es importante señalar el afán por movilizar en la función expresiva o narrativa del hablante elementos históricos[25], ya que esto representaría desde la obra de Bruner un elemento de coherencia; no hay relato de la vida sin una perspectiva, y cual mejor que una autobiográfica[26]; la razón radica en que se parta de un propósito investigativo que pueda ser nutrido por la participación histórica del sujeto en cuestión con el objeto de encontrar en sus narrativas[27] los referentes culturales y estados intencionales que define el concepto de significado como eminentemente característicos. El uso de la entrevista abierta radica en el reconocimiento de que toda historia de vida tiene en su base una entrevista cualitativa o entrevista abierta, y además, porque Bruner plantea esta técnica[28] como la más válida para abordar la variable significado. El análisis de contenido[29], fase del análisis de discurso[30], es un proceso sistemático que nos permitirá la interpretación más crítica de los elementos expuestos por los participantes en aras a descubrir los significados que allí se encuentran implícitos.

Los instrumentos

Son tres instrumentos que se aplicarán bajo el formato de la entrevista abierta, los cuales estarán en anexos. Estos instrumentos son uno para el padre de familia, otro para la rectora y el tercero para el estudiante. Todos serán realizados con el soporte de una grabadora para poder transcribirlo liberalmente con las tonalidades respectivas y someterlo a análisis. A su vez, se tomarán notas por un investigador de apoyo sobre situaciones ocurridas en el transcurso de la entrevista con el objeto de que pueda dar luces al proceso analítico y en consecuencia a la interpretación de las narrativas.
[1] “Diversos documentos y declaraciones internacionales se refieren a la escuela como promotora de la ciudadanía activa y de la cohesión social a través de la enseñanza que realiza de los valores cívicos. El célebre informe Delors insistió ya en 1996 en esa idea (...). Entre los objetivos de los sistemas educativos de la UE para el año 2010 se incluye “velar por que entre la comunidad escolar se promueva realmente el aprendizaje de los valores democráticos y de la participación democrática con el fin de preparar a los individuos a la ciudadanía activa”. http://debateeducativo.mec.es/pdf/d1.pdf: Ministerio y educación de ciencia. Los valores y la formación ciudadana.
[2] BÁRCENA, Fernando. El oficio de la ciudadanía. Barcelona: Paidós. 1997.
[3] CORDERO, Jasé Luis. El Desafío Latinoameñcano... y sus cinco grandes retos: Educación, Sociedad, Economía, Política y Ecología. Caracas: Mc Sr H/fl. 1995. p. 109.
[4] http://debateeducativo.mec.es/pdf/d1.pdf: Ministerio y educación de ciencia. Los valores y la formación ciudadana.
[5] “(...) Este malestar con la democracia tal cual lo vivimos, encuentra en la noción de sociedad civil un referente crítico. El término condensa el distanciamiento del ciudadano de cara al clientelismo político, la prepotencia burocrática y la ineficiencia estatal. La crítica de las insuficiencias de la democracia liberal hace hincapié en la falta de participación ciudadana (...)”. LECHNER, Norbert. La problemática invocación de la sociedad civil. Espacios n° 4, abril-mayo 1995. p. 32.
[6] “Esta precariedad de la convivencia ciudadana que va penetrando crecientemente múltiples instancias del relacionamiento social en el país abarca desde las relaciones cotidianas de los individuos con otros individuos como progresivamente de grupos de ciudadanos con otros grupos y con el Estado (...)”. CAMACHO, Alvaro y LEAL, Francisco (Comp.) UN/Facultad de Ciencias Sociales. Armar la Paz es Desarmar la Guerra – Herramientas para Lograr la Paz. Bogotá: FESCOL / IEPRI / CEREC / IEPRI, FESCOL, CEREC. 1999. p. 405.
[7] BRUNER, Jerome. La educación puerta a la Cultura. Madrid: Visor Dis. 1997. P. 62
[8] DORIS, Lamus. La formación de Ciudadanos: Una necesidad Actual. En: Rev. Educación y Cultura. No. 26, Abril de 1992. p 50
[9] BÁRCENA, Fernando. El oficio de la ciudadanía. Barcelona: Paidós. 1997. p. 101 – 102.
[10] BRUNER, Jerome. Realidad mental y mundos posibles. España: Gedisa. 2001. p. 128
[11] BRUNER, Jerome. Realidad mental y mundos posibles. España: Gedisa. 2001. p. 128
[12] “(...) convicción de que el concepto fundamental de la psicología humana es el de significado y los procesos y transacciones que se dan en la construcción de los significados”. BRUNER, Jerome. Actos de Significado: Más allá de la revolución cognitiva, Alianza, Madrid, 1991. p. 47.
[13] BÁRCENA, Fernando. El oficio de la ciudadanía. Barcelona: Paidós. 1997. p. 38.
[14] Ibíd. P. 77
[15] GARDNER, Howard. Mentes creativas. Una anatomía de la creatividad humana. Barcelona: Paidós. 1995. P. 53
[16] GARDNER, Howard. La mente no escolarizada: cómo piensan los niños y cómo deberían enseñar las escuelas. Barcelona: Piados. 1997. p. 27.
[17] SAMPIERI, Roberto; FERNÁNDEZ, Carlos; BAPTISTA, Pilar. Metodología de la investigación. México: McGraw Hill. 2001. p. XXVI
[18] Ibíd. P. 60.
[19] Ibíd. p. 60
[20] Ibíd. P. 61.
[21] Ibíd. P. 226 – 227.
[22] Ibíd. P. 227.
[23] GALINDO, Luis Jesús. Técnicas de investigación cultura y comunicación. México: Pearson Education. 1998. p. 297
[24] Op. Cit. P. 605 – 606.
[25] “(...) La función de la historia es encontrar un estado intencional que mitigue o al menos haga comprensible al desviación respecto al patrón cultural canónico”. “(...) la narración resulta un vehículo tan natural para la psicología popular” BRUNER, Jerome. Actos de Significado. Madrid: Alianza Psicología. 1991. p. P. 61.
[26] “(...) Existe una alternativa obvia y viable: efectuar la investigación retrospectivamente, a través de la autobiografía (...) Me refiero (...) a una descripción de lo que uno cree que ha hecho, en qué situaciones, de qué maneras y por qué razones, en su opinión” BRUNER, Jerome. Actos de Significado: Más allá de la revolución cognitiva, Alianza, Madrid, 1991. p. 117.
[27] “(...) la narración resulta un vehículo tan natural para la psicología popular”. BRUNER, Jerome. Actos de Significado. Madrid: Alianza Psicología. 1991. p. 62.
[28] “(...) Sin duda, el reciente reconocimiento de que las personas narrativizan su experiencia del mundo y del papel que desempeñan en él ha obligado incluso a los científicos sociales a replantearse la manera que utilizan su principal instrumento de investigación: la entrevista”. Ibíd. p. 113 – 114.
[29] El análisis de la psicología del lenguaje puede dividirse en tres partes. La primera examina el sistema del habla. La segunda analiza el significado lingüístico. La tercera considera la relación existente entre el lenguaje y cultura. La unidad generalizada de análisis es la categoría cognitiva”. BRUNER, Jerome. El proceso mental en el aprendizaje. Madrid: Narcea S.A. 2001.P. 239.
[30] “(...) Así que analizamos el discurso mismo, descubriendo palabras reveladoras, expresiones tan características como las firmas, las formas gramaticales del relato”. BRUNER, Jerome. Actos de Significado. Madrid: Alianza Psicología. 1991. p. 120


Breve interpretación de las tablas:

La narrativa de todo texto se encuentra compuesta por las figuras retóricas que denotan el compromiso del hablante con algunos elementos, y justifican a su vez, sus actos y comportamientos. La estructura que a continuación se presentará es justamente eso, una descripción estructural de acuerdo a las medidas de cantidad que sobre las figuras mismas se realizaron. Esto nos permitirá entender las razones por las cuales el significado de formación ciudadana se concibe de manera liberal o comunitarista.

La posición de la cual partiré es la presentación de las deixis, las referencializaciones, la personalización, los tipos y el tiempo de conjugación de los verbos utilizados y los tropos simples, tales como la metonimia, la sinécdoque y la metáfora. Posteriormente, se presentarán los elementos alusivos a las subcategorías que configuran la variable significado de Bruner, con el objeto de comprender la riqueza del relato, y su función.

En el relato del PADRE tenemos 882 líneas de expresión, para 109 párrafos, descompuestas en 375 unidades de análisis, configuradas por 12266 palabras. Estos datos nos muestras que la capacidad del padre desborda en su capacidad narrativa en un aproximadamente 50% tanto a su hija como al docente. Además, nos muestra que la manera de construir los relatos es mucho más elaborada en él ya que pese a doblar a su hija y al docente, sus párrafos, es decir, sus grupos de expresión narrativa no lo desborda. Esto indica la capacidad de mantener un relato hilándolo con experiencias personales, símbolos, juicios. Razón distinta en la hija como veremos más adelante. Además, las figuras retóricas del texto confirman lo afirmado. El único que utiliza metonimias con tanta frecuencia es este personaje. Esto indica cómo la recursividad de la jerga popular se presenta como referencia del hablante. En cuanto a las metonimias nos encontramos un elemento interesante y es el referido a los significados que estos enseraban de acuerdo al género. Por ejemplo, la palabra ‘perro’ al ser pronunciada por el género femenino hacía alusión a ‘persona de malos sentimientos’, ‘persona en la que no se puede confiar’; esto consta porque no siempre era referida a un acto de infidelidad. Por otra parte, la palabra ‘perra’ pronunciada por el género masculino, sí buscaba crear una metáfora de lo que se entiende popularmente como ‘mujer vagabunda’, ‘mujer que lo hace con cualquiera de la calle sin importar nada, sin medir consecuencias, sin tenerse respeto’, y así podríamos continuar la cadena de significantes que le hace valorar el acto como una desilusión o un desconcierto en la relación de pareja. Las metáforas -17- indican también la capacidad de representarse el mundo, y muestra a su vez, una identidad típica de nuestra realidad costeña, por cuanto a que las imágenes que recrean las metáforas hacen alusión a un insulto por infidelidad, pelea, un murmullo, un gentío, una pelea casada, característicos de nuestros contextos rurales.

Por otra parte, los verbos que son utilizados la mayor en las unidades de análisis son los declaratorios, lo cual confirma el hecho que la cultura atraviesa el discurso del padre. Los verbos declaratorios anuncian algo, y esto justamente es lo que hace el relato del padre, anunciar un modo de vida, una manera de hacer la propia, por medio de una estrategia de comparación cultural a nivel endógeno, es decir, entre sus grupos de amigos, de vecinos y su mismo núcleo familiar se deciden cuales son las acciones sociales de mayor beneficio de acuerdo a cómo le funcionan a una mayoría.

Sumando argumentos a lo afirmado el relato del padre es el único que construye dos personalizaciones, ambas en unidades de análisis donde los verbos son declaratorios, poniendo en boca de su comunidad, el animismo que los caracteriza. Y de acuerdo a la designación de un actor responsable, tenemos que el relato del padre da un favoritismo con un casi 93% a las deixis, lo que representa en su discurso la tendencia a no dejar en el aire los responsables de las acciones que define. Esto será profundizado más adelante, pero es conveniente dejar por sentado que será decisivo este punto para determinar si esta identificación frente al otro significa en el actor un reconocimiento de la orientación de mi responsabilidad, o si es una manera de identificar al otro para librarme de mis deberes.

Entrando en el relato de la HIJA – ESTUDIANTE quien es denominada así por el hecho de cumplir en su relato dos roles distintos sobre los cuales nutre y se nutre de tanto de la institución familiar como de la educativa. Respecto a su construcción narrativa tenemos que la configuran 190 unidades de análisis, desarrolladas a lo largo de 192 párrafos. Pese a tener la mitad del número de palabras que su padre, y casi un 40% menos de sus unidades de análisis, tiene una capacidad narrativa limitada por cuanto a que la ilación de sus ideas es entrecortada, por lo que lo demuestran los 192 párrafos que casi doblan los de su padre. Otro dato que confirma lo anterior es la relación entre las 6616 palabras y las 588 líneas que configuran el texto, lo que muestra esa poca capacidad relatora.

Respecto a los tipos de verbo que utilizó en un casi 46% son de tipo declaratorio, lo que confirma su manera de referiste a los otros para de ahí sacar conclusiones personales. En la mayoría de sus declaraciones identifica un actor, un responsable de la acción. En cuanto al uso de las figuras retóricas como la metonimia y la metáfora vemos una ausencia de las primeras, pero 10 respecto a las segundas. Las imágenes aluden o involucran los espacios públicos y las acciones prohibitivas que se entretejen en los espacios públicos a los cuales pertenece y en ocasiones no aparece, mas se deja manifiesto su deseo de poder estar.

Respecto al relato del DOCENTE tenemos un producto de 92 unidades de análisis, lo cual lo hace el más compacto, pero sus 59 párrafos lo colocan como mejor relator que el anterior sujeto, con sus 536 lineas, ya que demuestra esto su capacidad de ilación. Es significativo el número anterior por lo que pese a no tener mucha diferencia de palabras con la hija – estudiante -250, el docente muestra en sus pocos párrafos, una unión mayor de palabras, por lo que representa una capacidad narrativa más desarrollada; sin embargo, frente a las 375 unidades del padre, en apariencia se muestra limitada su imaginación por el propósito de querer ceñirse en sus contenidos a la abstracción de la vivencia comunitaria; su rol dirige, sin duda, su discurso. El uso de las metonimias no aparece, y el de las metáforas es de 6, por lo que denota su búsqueda de abstraer la experiencia tratando de hacer del espacio de narración, un espacio de lección. En el análisis de las subcategorías de significado podremos profundizar en esto. Por ahora, falta decir que el tipo de verbo utilizado con un 58% fue el declarativo. Esto nos confirma lo dicho hasta ahora, ya que sus enunciados abstractos buscaban enunciar lo que él consideraba como cierto, que como veremos, muy cerca de una verdad universal pretende estar.

En sus unidades de análisis podemos denotar recurrencia a identificar un actor social que por lo general era un referente institucional o personal en su ejercicio como docente. Sin embargo, podemos ver un incremento, en relación con los anteriores, del uso de las referencializaciones, característico de un discurso abstracto, en el que el mismo relator tiende a perderse. Veremos en su momento, si esto lo libera de su acción social, o es sólo una manera de asumir su rol narrativo.

Ahora bien, en cuanto a la presentación de las subcategorías de Bruner tenemos que en cuanto a la narrativa del PADRE es construida con una tendencia marcada por las referencias culturales. Esto nos confirma que su narrativa es producto de su interacción con su medio, ya que cada vez que la opinión que tiene de sus formas de relación la debe en parte a lo que el denomina ‘estar comparando’ su vida personal con la de quienes lo rodean. La interacción entre su mundo personal y su mundo cultural se evidencia en cuanto a que después de cada referencia cultural colocaba su posición personal, para lo que la subcategoría experiencia, que hace alusión a hechos vividos, lo muestra con el segundo número más elevado, luego de las referencias culturales. Es conveniente aclarar que lo que se encontró en el discurso del padre contiene una dialéctica entre su pasado, su presente y su futuro. Esto significa que los significados que fueron encontrados no todos coincidían, pero, uno, en la medida en que hablaba los construía, y dos, no todos son permanentes sino que de acuerdo a lo relatado, iba modificando sus mismos propósitos. Una subcategoría que pesa de manera significativa en sus relatos son las creencias. Los estados intencionales de sus significados construidos tienen, como característica de nuestros contextos culturales, mucho de opinión pública, suposiciones o prejuicios que en el transcurso de su vida ha ido cosechando. Por ejemplo, la decisión de no emprender una nueva vida amorosa está cimentada en la creencia sobre los sentimientos prima un sistema económico de sostenimiento sobre el cual se decide si se sigue o no con la pareja. Esto no le representa ninguna estabilidad al padre, por tanto, no decide iniciar una vida amorosa. Otro ejemplo nos muestra cómo el padre a raíz de sus experiencias familiares y culturales donde la violencia es el vínculo de relación entre padres, hermanos y demás, procura no regañarlos sino hablar con ellos, porque cree profundamente que a partir de la comunicación las relaciones se fortalecen y crecen sin obstáculo. Los propósitos del padre están orientan la construcción de significados más proclives a la estabilidad del hogar y la proyección de ver a sus hijos educados, felices e independientes. Las imágenes que acompañan estos sentidos tienen sus raíces en las referencias culturales, a modo del lado negativo de una foto. Ahí se proyectan los temores más vívidos que comprenden tanto el maltrato físico y verbal como el psicológico entre familiares y vecinos. La imagen de la ruptura con su esposa es uno de esos tantos ejemplos, las peleas entre sus vecinos y los métodos utilizados por ellos para educarse o más bien, controlarse para sus propios propósitos, son otros que nutren tanto sus apuestas en un futuro mejor, como el deseo de que ciertas situaciones pasadas no vuelvan a repetirse. Los símbolos recurrentes en su discurso la plata, la salud, la familia, la violencia, la marihuana, y la prostitución, el gentío, el murmullo, la infidelidad y sus partidas como objetos, características, estados que atraviesan constantemente su discurso, donde busca, como veremos en el análisis hermenéutico, describir su situación personal desde un trasfondo gestáltico que es su experiencia personal y la situación del barrio.

Respecto a la narrativa de la HIJA tenemos que la subcategoría más utilizada por ella es, al igual que su padre, la referencia cultural, pero no muy distanciada de las creencias. Las creencias en este personaje nos representan los anhelos de vidas futuras mejores, donde surge el efecto también del negativo, donde la expresión de sus creencias y sus deseos es el lado contrario de su historia personal. Sin embargo, las experiencias personales no son significativamente numerosas, esto a raíz, posiblemente de su poco desarrollo narrativo. Se pudo notar que el propósito de su vida está encaminado a alejarse de los caminos por los cuales optan las personas del barrio, y decidirse a formarse como una buena mujer. Aquí, como veremos en el análisis hermenéutico hay una fuerte influencia de su padre, aunque ella misma se presente como distante a él. La imagen que persigue durante todo su relato a este personaje es el temor de quedarse sola, para lo cual se vale de una y otras estrategias al menos para conseguir compañía; compañía que bien pueden estar condicionadas por la obligación asumida de realizarle las tarea a sus compañeras. El afán típico de una joven de 15 años de ganarse un puesto en su mundo no se confronta con sus proyecciones, y muy al estilo de su padre, aunque con métodos distintos, se mantiene firme en sus convicciones no permitiendo malas influencias de otras personas en su vida diaria. Cree firmemente que los modelos culturales no son los mejores, pero tambien afirma que la falta de confianza en los hijos, no lleva tampoco ninguna parte. Las dificultades que ha tenido en su vida familiar pasada y con sus amigas actuales, que entre otras no sabe si llamarles todavía así, hacen que por una parte centre su interés en su familia, y haga las veces de indiferente frente a las estructuras cotidianas –no la escuchan sus amigas, no es valorada como merece por su familia-, con el objeto de no sufrir. La culpa que se atribuye por la separación de sus padres es un recuerdo, que como su padre, la sigue acompañando, habiendo encontrado en su canto refugio personal y una clara proyección social, por medio del cual aspira a poder influir en la gente.

Y respecto a la narrativa del DOCENTE tenemos que existe una tendencia incrementada hacia cimentar su discurso en las creencias, característica común con quien ha declarado verdades en su relato. Las creencias de este docente están soportadas en la defensa de una institucionalización del saber como medio y fin para hacer de los seres humanos mejores personas, aunque soportadas en una concepción cotidiana del mundo. El propósito de sus afirmaciones está dirigido de manera uniforme a proyectarse como una líder, capaz de señalar caminos de bien y jalonar a quienes pueda en su paso. Además, el cambio del contexto hace que la orientación de sus construcciones sociales se encamine a pensar un mundo en equilibrio, sin desacuerdos, con paz. Cualquier parecido entre la figura mesiánica no es coincidencia. Los referentes culturales se convierten en este personaje en la base de su inspiración, para hacer de su proyecto de vida una entrega al servicio de la comunidad. Aunque en número las referencias culturales no sean muchas, las imágenes que se desprende de ahí son impactantes como la de una cantidad de niños hambrientos, desprotegidos, con malos ejemplos, con incitaciones a la prostitución y sin oportunidad de educarse, hacen del barrio donde labora un espacio de destrucción de la juventud.

Análisis hermenéutico

Una mirada integradora entre los relatos del padre, su hija estudiante y el docente.

Luego de valorar cada relato y analizarlos a la luz de los elementos teóricos característicos de la formación ciudadana, quien escribe aún se encuentra en deuda con los entramados conceptuales que en el transcurso del marco teórico se expusieron. La integración será realizada desde una mirada holística de los tres relatos, buscando desarrollar en ella la exposición del modo cómo influye la modernidad en el contexto, y su relación con los antecedentes del Colegio Golda, alterno, será pertinente hilar cómo la ausencia de políticas públicas condiciona, y en momentos pareciera determinar el concepto de desarrollo social y la antropovisión que lo soporta. Los procesos psico – socio – culturales como mecanismos de interacción cultural serán descritos y expuestos comparativamente con los relatos desde la manera cómo influyen las instituciones familiares y educativas en sus procesos de socialización.

Si valoramos las instituciones que nuestros personajes representan como espacios de socialización tenemos que ambas tienen como a modo de fondo gestáltico, la realidad social, política, económica y cultural del barrio Las Américas; como se puede evidenciar en el diagnóstico socio – educativo realizado por Turbay –quien escribe- y Polo, el barrio se caracteriza, como lo afirmaría Vargas, por presentar una violencia estructural manifestada en la exposición a las drogas, la poca oportunidad laboral, la ausencia de modelos familiares que permitan la socialización en valores que permitan fundar una democracia participativa, la inoperancia de redes sociales, donde la drogadicción, la prostitución, la delincuencia, se convierten si bien no en sus consecuencias directas, si en sus derivados. Si tomamos el Colegio como fondo, y la acción social del hombre como figura desde la cual en su vida cotidiana afronta sus crisis, podría ser dicho contexto el espacio desde el cual se asumen las riendas del propio destino, y no una excusa determinista de no tomar partida en las situaciones que se presenten.

El ejercicio de la ciudadanía se podría ver dificultado o cuestionado desde estos contextos, pero es desde el mismo espacio en crisis donde justamente se valida el ejercicio ciudadano. La ideología liberalista que funda las instituciones como responsables de la organización comunitaria, muestra a la sociedad civil incapaz de resolver sus situaciones problemáticas. El despertar de esta sociedad civil[1] debe, entonces, estar encaminado a la responsabilización social de sus acciones, a la recuperación de la esperanza, ya que la percepción que del mundo se tiene, dadas por otras fuentes institucionales, puede terminar aplacando el deseo de superación de las masas, y a modo de estrategia comunicativa, instaurar al Estado como único capaz de retomar un equilibrio que falsamente se promete como constante.

Según Lechner, la búsqueda en la innovación de la sociedad civil, actores sociales que hagan de sus anhelos y deseos, una realidad en la cotidianidad, capaces de romper esquemas, de entrar en relación aunque la violencia sea el pan de cada día, de promover el diálogo aunque la ley del más fuerte intente condicionar los mismos vínculos familiares, de cooperarse aunque la ley del más vivo caracterice su entorno social, de proyectarse aunque el pasado se muestre como más poderoso que sus voluntades disgregadas. Lechner afirma lo siguiente:

“La invocación de la sociedad civil significa una interpelación de nuevos actores sociales. Podemos distinguir dos perspectivas. El enfoque liberalista, más que liberal, festeja la modernización como una revolución silenciosa que libera la iniciativa privada de la tutela estatal y que ofrece a la libertad individual todas las oportunidades de creatividad. Incluso la informalización de la actividad económica es vista como un potencial de desarrollo empresarial. Fortalecer a la sociedad civil significa, según esta interpretación, hacer de la empresa privada el motor del desarrollo social. Desde un punto de vista opuesto, podríamos denominarlo comunitarista, la invocación de la sociedad civil apunta a los nuevos movimientos sociales”[2].

En los tres participantes es importante recalcar que la idea de la modernidad está presenta con la forma de la educación. Padre, hija y docente le apuestan a que la ignorancia es uno de los factores determinantes de la pobreza, la drogadicción, la prostitución, la holgazanería, en fin, del ‘mal camino’. Esta idea de modernidad está cimentada en la creencia que quien se educa tiene mejores posibilidades de triunfar y realizarse en la vida. Es importante rescatar que aunque necesidades pasen los tres personajes, no se rescata lo económico como la razón principal por la cual se esfuerzan día a día en sus tareas. Acompañan sus acciones con la idea de un futuro mejor, de un cambio que el tiempo y Dios se están encargando, a modo cómo si su ‘buen comportamiento’, por la opción del ‘buen camino’ tendrá su recompensa. Estos anhelos son confrontados en su cotidianidad con quienes demuestran que sin estudio y sin esfuerzo pueden conseguir lo que desean, y hasta más. Este efecto es denominado por la psicología social como disonancia cognitiva[3]. Quienes delinquen y consiguen con menor esfuerzo lo que muchos no podrían conseguir por mucho que lo intentaran, no son para los personajes, a diferencia de la mayoría de la población juvenil del barrio, ejemplos, ni cuestionamientos en sus metas. No hay que negar que la necesidad económica no sea importante y significativa para ellos, pero a diferencia de quienes describen en sus relatos como co-protagonistas – habitantes del barrio -, para los tres personajes tiene un propósito el ingreso, y no es un fin en sí mismo, ni para sí mismos. Sus metas de dar mejores oportunidades a quienes los rodean, son uno de los propósitos que les ayuda a trascenderse a sí mismos, y a encontrar en sus vínculos emocionales las mejores razones para luchar día a día por conseguirlos. Más adelante aclararemos cómo la hija, entre los otros personajes, es quien pese a mantener esa utopía, la mantiene en abstracto, delegando en ocasiones la acción a otro inmediato, o en ocasiones a Dios o al tiempo mismo.

Martín – Baró nos habla sobre las características del latinoamericano en sus formas de asumir el mundo, asociando en su fondo actitudinal un contexto social del cual se nutre, denominada por él una cultura de la pobreza[4]. Esta cultura, de la cual el individuo es constructor social, lo lleva a considerar que su desesperanza está, al estilo humanista tradicional, muy de la mano con la falta de satisfactores que los motiven a salir adelante. Esta tendencia de colocar en lo externo, o la búsqueda de causas sociales lleva a que el ser humano disminuya su afán de búsqueda de significados distintos. La orientación, los propósitos personales se traspapelan con las necesidades cotidianas, no dejando ver en ellas, lo que buscan.

Aunque el discurso esté movilizado por una utopía de desarrollo, éste tiene unas implicaciones que valen la pena rescatar. Si bien los personajes colocan sus metas en otro distinto a sí, haciendo de sus vidas una herramienta social que los podría valorar como ciudadanos, independientemente de la perspectiva histórica a la que pertenezca cada uno, de acuerdo a su ejercicio, no logran todos sus cometidos. La idea que se deriva del contexto socio cultural de desarrollo, está sujeta a la creencia de un ser externo, sea Dios, o a la dinámica histórica que por evolución se modifica con el paso del tiempo. Esta idea de desarrollo, es una propuesta caracterizada, como toda utopía, de esperanza, pero una esperanza que aunque de vida, limita en ocasiones las acciones, sobre todo en la hija. La idea de que el desarrollo social se da garantizando el bienestar social, como afirma el docente, o esperando en el tiempo que las cosas cambien como afirma la hija, son ejemplificaciones de lo afirmado. La idea, pues, que se desprende del ser humano que se sitúa detrás del desarrollo tiene una tendencia humanista, desde la cual se piensa que el ser humano si se le dan todas las garantías puede tender por sí mismo al autodesarrollo. Aquí notamos, en cuanto a sus mecanismos psico – socio – culturales una escisión entre lo que anhelan y lo que hacen. Algunas veces a favor de la utopía esperan lo que pueden hacer con sus manos en un momento determinado, pero en otras ocasiones, a su favor, actúan sin esperar nada que los haga esperar, cómo el caso del padre quien tomó las riendas de su sostenimiento económico por sí mismo, pero movilizado por la ilusión de ver a sus hijos en la institución educativa.

El desarrollo en estos contextos sociales implica una visión, según Ignacio Martín – Baró, Maritza Montero, y demás, más agresiva. Invita constantemente al cambio, al desafío, a la construcción social de la realidad, a la revaluación, reintepretación, resignificación, y por qué no, creación de nuevos significados que nos vinculen con el mundo que vayan más allá de lo moral[5]. Sin embargo, la visión autodesarrollista que sobre el desarrollo social tienen parece ser derivada de una estructura tradicional, pero con la que parecen luchar en sus vidas cotidianas, a excepción de la hija, de la cual no podemos desconocer su contexto madurativo: 15 años. Sin embargo, la idea de que los jóvenes crecen rápido en estos contextos, es desestimada en ocasiones, como es el caso, ya que el padre ha cubierto las necesidades básicas casi en su totalidad, desde la educación hasta su entretenimiento y la promoción de su talento musical.

Los modos cómo construyen los significados que los hacen más o menos activos en su comportamiento social pasan por la percepción del mundo, como un espacio lleno de oportunidades, pero al tiempo, con oportunidades que exigen ser merecidas por medio del sacrificio y del trabajo, las cuales se podrían facilitar si se es educado. Desde Gardner, esta percepción del mundo hace de los mecanismos psico – socio – culturales como la inteligencia, un ejercicio práctico de habilidades intrapersonales que permitan aprender de lo vivido, para poder lograr lo deseado; de habilidades como las personales que permitan hacer del encuentro con los otros una oportunidad de desarrollo personal, donde personajes como el padre y el docente son más fieles ejemplos que la misma hija, quien a falta de un ejercicio intrapersonal, entra en un círculo vicioso que en ocasiones la anula de su compromiso social, quedando éste sólo sometido a la espera del tiempo o de Dios.

Es importante percatarse que las imágenes de la espera, de Dios son sólo propias de quien asume su vida con mayor pasividad; pero en cuanto a quienes al menos se muestran más activos en su rol como padre o como docente, concientes de su representación institucional, procuran con su testimonio mostrar, aunque de modo liberalista, el camino mejor a seguir.

La influencia de la modernidad genera en los personajes una categoría supraordinal, como diría Bruner, en la cual se hace preeminente la educación, y donde la vida en paz, en tranquilidad se convierte en uno de los principales motivos por los cuales actuar. Estas categorías orientan la acción del ser humano, y elementos materiales como la plata son significantes que implican en su consecución medios que facilitan o generan oportunidades de crecimiento. Es importante resaltar en esta oportunidad que la capacidad axiológica del ser humano está movilizada de modo alterno por el ejercicio de la construcción y generación de estas categorías. Los significados funcionan de manera alterna al acto valorativo, donde el trabajo, las relaciones con los otros, y el emprendimiento con que las asumo son variantes en cada uno de los personajes de acuerdo a sus propias construcciones. Por ejemplo, el significado que de formación ciudadana tiene la hija lleva a que por la abstracción en la que vive, a raíz de la evitación del dolor que le causa sentirse rechazada por los otros, haga que sus relaciones afectivas tengan siempre un interés de buscar compañía, la cual está dispuesta a sacrificar su propia autonomía por conseguirla, aunque a fin de cuentas termine descubriendo que de nada le sirvió tal conducta. En el caso del padre, su manera de convivir en sociedad, está movilizado por el valor que para sí tiene su familia, propósitos desde los cuales orienta todas sus acciones laborales, donde su principal propósito es lograr la paz a través de una convivencia cooperativa; su significado se nos muestra como un conjunto de acciones que permitan tal objetivo, el cual, anclado en su pasado, a diferencia del modo cómo construye su pasado día a día, su dolor, se ha convertido en la razón por la cual vivir para no repetirlo, siendo su familia actual la mejor oportunidad de permitírselo. En cuanto al docente, el significado que tiene sobre su labor docente va más allá de un fin lucrativo, siendo la ilusión de dotar a la comunidad de esperanzas de convertirse en mejores personas, su orientación principal en su rol docente. La construcción social, como podemos ver, es un proceso dialéctico entre lo que es, lo que se desea y lo que se cree, se resignifica desde el pasado hasta el futuro, con la acción constantemente presente. Es claro que los significados que llenaron de contenido los roles del docente, del padre o de la hija no son los mismos hoy. La falta de actualización de significados, representa justamente el haberse rendido ante las situaciones y retos de la vida cotidiana. Visto así, tiene razón Gardner cuando afirma que el hombre no es un ser racional, ya que si sólo la razón fuese lo que caracterizase las acciones sociales de los hombres, este mundo obedeciera a la norma por instinto. La racionalidad, si bien es cierto, tiene un sentido cuando se proyecto a un fin social, no tiende por naturaleza a ello. La escisión de los seres humanos parece ser una herencia de las filosofías clásicas que en nuestra cultura raptan el sentido común, infringiendo la misma condición humana de que somos razón y emoción, seres sentipensantes. Rorty sostiene que esta racionalidad tiene un propósito, que como Horkheimer involucra el compromiso social, la convivencia civilizada como le llamaría Bruner. Rorty al referirse a esta temática sostiene de la racionalidad lo siguiente:

“Racionalidad es más o menos sinónimo de tolerancia, es decir, de la capacidad de no desconcertarse por la existencia de diferencias y no responder agresivamente a ellas. Esta habilidad va unida a la voluntad de alterar los propios hábitos, no sólo para obtener más de algo que ya queríamos, sino para hacer de uno mismo un tipo de persona diferente (...) También va unida a una confianza en la persuasión más que en la fuerza, a una inclinación a discutir las cosas antes que a luchar, quemar o desterrar. Es una virtud que permite a los individuos y a las comunidades vivir y dejar vivir y poner en marcha formas de vidas nuevas, sincréticas y producto del compromiso. Este tipo de racionalidad se ha pensado a veces, como en Hegel, como cuasisinónimo de la libertad”[6].

Como amplitud de los elementos axiológicos que caracterizan al ser humano como un ser capaz de asumir acciones prosociales en su medio, autogestoras y promotoras de la sociogestión, resta decir que la modernidad también trae consigo una ruptura entre la vida pública y privada[7]. Es por ello, que el padre al tiempo que se compromete con la mejora de su vida, asume que la vida mejor es la que el piensa para sus hijos, y la contracción a la idea, lo hace en ocasiones caer en las herramientas culturales que critica como la infusión de miedo. O el docente que se compromete con adaptar el PEI del colegio a una estructura constructivista de aprendizaje, pero que identifica en las normas de Carreño uno de los elementos vitales para la mejora en la vida social de parte de los estudiantes.

Esta ruptura entre vida privada y vida pública existe sólo en nuestra abstracción de la vida social, sin embargo, la vida cotidiana opera incesantemente en interacción con ambos sistemas. Padre, hija y docente viven en ese sistema, y participan de él, pero la escisión que está promovida por vía cultural, le muestra que la vida social es del ‘màs vivo’, que ‘estudiar no sirve de nada’, que ‘prostituirse, drogarse, pelear es algo normal’. Un mundo así, confronta mi acción social, y le exige aferrarse a un valor tan cognitivo como axiológico puesto que de lo contrario, en la imagen del mañana sólo existirán los mismos caminos que desde ayer conoce; es, pues, la politización[8], para las instituciones familiares y educativas una de las estrategias de fortalecimiento en los procesos de socialización[9] impartidos a sus principales protagonistas: hijos y estudiantes. Desde Michaud, la persistencia de este tipo de violencia social exige la participación de los estados intencionales “de manera directa e indirecta, inmediata o diseminada (…) en su integridad física, (…) moral, en sus posesiones, en su participaciones simbólicas y culturales” (Citado por Vargas, p. 224).

Respecto al ámbito educativo merece hacerse una reflexión sobre los elementos que se promueven en la formación del ser humano, tanto desde la institución familiar como la educativa. Respecto a lo que tiene que ver con las instituciones educativas, la ausencia de la participación de grupos juveniles, redes sociales, representantes frente al concejo estudiantil anulan la posibilidad de negociar un propósito de participación democrático o representativo. Hoy día, se presenta la veeduría como estrategia socio – cultural capaz de transformar o en su defecto, controlar las condiciones sociales. Dicha herramienta a nivel de la institución educativa se convertiría en una forma de caracterizar la endoculturación[10] que se promueve a su interior como una réplica de la vida en sociedad. Zubiría afirma sobre a veeduría que ésta:

“(...) Se basa en el principio constitucional de la participación pilar fundamental en la constitución del Estado Social de Derecho. Cada vez más se reconoce en la veeduría ciudadana una estrategia de participación que hace posible que las comunidades tengan un mayor control sobre las situaciones que las afectan (...)”[11]

El rol de estudiante, por ejemplo, pareciese diluirse en la norma que invita a ser disciplinado o buen estudiante. Aquí es cuando la reflexión realizada sobre el concepto de desarrollo tiene su lugar, ya que la vida social no cambia por sí, no tiene una naturaleza propia, es según Gadamer, simplemente un inicio lo que podemos conocer, pero son justamente las situaciones de crisis y de antidesarrollo las que se convierten en opciones reales de desarrollo. La falta de empleo motiva a un padre a ser su propio jefe lográndolo y otorgando las oportunidades que desean sus hijos, desde la educación hasta el entretenimiento. Un docente lucha por la construcción de un PEI fundado en valores y una estrategia constructivista en un contexto donde la delincuencia y la violencia son el común denominador de las acciones culturales, y donde la institución educativa se encuentra fundada en conceptos tradicionales. El horizonte no señala una llegada, señala un camino abierto de posibilidades en situaciones que bajo otras circunstancias no podríamos definir como potenciales de aportes personales y sociales.

Desde Arendt, comentada por Amiel, tenemos que toda acción social no se le es reconocido su final hasta luego de haberse ejecutado[12]. Esto nos lleva a confrontarnos con que la única manera establecer vínculo con nuestras crisis sociales, es convirtiéndolas en oportunidades de desarrollo; de ahí la demanda que surge de pensarnos a nosotros mismos y los con-ciudadanos como capaces de transformar nuestro medio social. La perspectiva estática, en ocasiones movilizada por la tradición liberal de la formación ciudadana, deja a otros la responsabilidad que están en nuestras manos.

El contexto social contiene entonces, lo que Ogbürn acerca de la culturización, y es que la modernidad aspirada por los personajes no se logra con la implementación institucional de un centro educativo, ya que como bien material no lleva implícito un cambio cultural. La labor institucional de los centros educativos tiene el reto del fortalecimiento cultural, bien inmaterial, que atraviesa los núcleos familiares para conformar la vida en sociedad. Los procesos de socialización tanto en la institución familiar como en la educativa deben promover oportunidades de negociación, donde la diferencia se convierta en una oportunidad desarrollo personal, y fomento del bienestar social. El bienestar social mientras sea entendido como la condición necesaria para conseguir la paz a través de la satisfacción de las necesidades básicas, restará la oportunidad en el sujeto de hacer de su mundo algo distinto. Al respecto Lechner propone el encuentro en el diálogo como la única herramienta cultural válida para tal efecto:

“(...) Fortalecer la sociedad civil significa, en este sentido, permitir a los ciudadanos conformar la voluntad colectiva de acuerdo con el cálculo racional de sus intereses individuales. Este enfoque (...) no es un asunto exclusivo de las izquierdas”[13].

Bruner y Gardner nos presentan unos modelos educativos contemporáneos que se alejan mucho de la realidad descrita, pero no por ello no pueden implementarse como sistemas de reestructuración organizacional. Por su parte Bruner habla de 9 postulados en los que funda la misión de las instituciones educativas desde su perspectiva constructivista. Lo que denotamos en los relatos de los participantes es una sobrevaloración del postulado instrumental, en el que se propone la educación como un medio de evolución social, aunque sea un propósito en la construcción del significado de parte del docente y del padre en su vida cotidiana. Esto llama la atención desde la propuesta educativa comprensiva de Gardner ya que aunque existan acciones sociales que lleven al movimiento de un ser humano, la visión que sobre sí, sobre los otros y sobre el mundo tiene, es reducida a los elementos funcionales que les signifiquen. El ser humano desde la propuesta comprensiva de Gardner es un sujeto con talentos desde los cuales puede hacer de su vida, más que un repertorio de conductas automatizadas por la cultura. El ser humano en el ejercicio de sus capacidades puede hacer de su vida, un proyecto, donde sin lugar a duda en el tema de la formación ciudadana, el fondo y el potencial del desarrollo de su aporte a una ‘convivencia civilizada’ lo tendrá en el la capacidad intrapersonal e interpersonal como dos inteligencias que a modo interactivo, se retroalimenten. De este modo, la institución educativa se debe convertir en un espacio donde la reflexión – intrapersonal – lleve a la acción[14] social del encuentro – interpersonal-, y a su vez, el encuentro, revalúe los modos intrapersonales como se concibe la participación en la sociedad.

La anterior reflexión nos sitúa en un marco antropológico de carácter axiológico, que guardando la diferencia epistemológica que con el constructivismo tiene, no se puede negar que parten del modelo de las ciencias del espíritu de Dilthey. El hecho de que el ser humano en su encuentro con los otros tenga la oportunidad de crecer y desarrollarse, se fundamenta desde la perspectiva de Scheler como la oportunidad que tiene todo individuo de encontrarse en el otro, la pregunta que le obliga a buscar sus propias respuestas. Reyes nominaría a esto una acción democrática puesto que:

“La democracia hoy en día presupone un desarrollo de la individualidad, de la libertad personal y del sentido autónomo de identidad, sea esta individual o colectiva”[15]

El caso del docente lo vemos reflejado cuando su relato nos narra cómo en relación con sus estudiantes en su primera experiencia, le ayudan a encontrar un valor en la docencia que no creía tener. En el padre, por su parte, hace de su relación frustrante con su esposa, y sus crisis familiares en su núcleo familiar, un motivo para con sus propios hijos lograr la tranquilidad y la unión familiar que siempre anhelo. De parte de la hija, sucede lo contrario, ya que su falta de aceptación de la separación de sus padres, abstrae sus relaciones sociales huyéndole al dolor, pero no logrando otra cosa que incrementándolo cuando no arriesga de sí para mejorar hacer de los encuentros, en palabras de Buber, libres de intereses, y en palabras de los constructivistas libres de prejuicios.

Por último, cabe resaltar que la capacidad narrativa de los relatores expresa su modo de construir su mundo, sin embargo, el afán de parte de la hija por desarrollar imperativamente sus capacidades lógico – matemáticas, del docente y del padre por ser menos ignorantes, hace que el pensamiento narrativo, aunque sea la base de su construcción, no sea valorado. Esto tiene mucho que ver con la escisión mencionada anteriormente que tiene sus derivados en la vida educativa, que por influencia de la modernidad, se piensa un ser humano dividido entre su intelecto por el cual se busca la superación de la ignorancia, y su vida emocional, que pareciese valorada como una parte que demanda amaestrarse por parte del pensamiento paradigmático.

Esto no llevaría a otra parte sino a la instauración de democracias nucleares, pero la proyección social estaría limitada por cuanto a que la apuesta por los otros que “no me pertenecen” no le significa a los relatores esfuerzos que ameriten dicho sacrificio.

Aprendizajes teórico prácticos:

“Los psicólogos o educadores que formulen teorías
pedagógicas que no tomen en consideración las bases
políticas, económicas y sociales de la educación caen
en la trivialidad y merecen ser ignorados en las calles
y en las aulas” (PALACIOS).

La experiencia investigativa generó distintos aprendizajes, cada uno cifrado en los modelos teóricos que se permitieron la investigación. Estos modelos son el marco educativo, la propuesta de Bruner y la de Gardner, la concepción de formación ciudadana, aportes desde la utilización del método y las técnicas, y sobre el valor teórico en general. Cada ítem lo encontrará asociado a modo de viñetas en cada temario con el orden respectivo. Los aprendizajes que a modo de conclusión se presentarán a continuación pretenden servir de base en investigaciones que sobre esta temática y/o esta variable interesen, buscando promover la apertura a modelos mixtos y cualitativos.

Respecto al contexto educativo se puede concluir lo siguiente:

• De lo contrario, muy al sentir del docente, existirá una confrontación entre la supuesta formación de valores y el deber que la cotidianidad trae consigo de conseguir recursos para la vida.
• El trabajo desde la institución educativa no sería tal si no se invitaran a los actores sociales no sólo a realizarles diagnósticos como ‘escupidores de información’, sino a integrarse a una labor emprendedora por su cambio que los involucre en las acciones gestoras y evaluadoras.
• Este trabajo comienza en las aulas, en el recreo, en los modelos de relación en los que participan de manera indirecta como el grupo de docentes, las relaciones entre docentes y administrativos, las relaciones y los espacios de participación de los aseadores o colaboradores, el respeto de los diferentes diálogos, por ejemplo el eclesial en una clase distinta a esa de parte del profesor.




De acuerdo, a la relación que las inteligencias tienen en el tema investigado:

• Las habilidades que marcan la pauta en la ciudadanía son las interpersonales e intrapersonales por sus implicaciones directas con la relación con el otro, pero el resto de habilidades no implica que no funcionen como apoyo.
• El dinamismo que entre las inteligencias personales existe ya fue citado por Gardner, pero vale la pena la acotación cómo en el contexto de la ciudadanía las dos se requieren necesariamente.
• La promoción de las habilidades distintas a las intrapersonal e interpersonal, se convierten en formas constitutivas de asumir la ciudadanía.
• La ciudadanía desde la inteligencia múltiple es una manera de asumir los distintos roles que como ciudadanos podemos llegar a tener, y considerar que cada acción que emprendemos puede tener un fin social, y en su revés una realización personal, o viceversa.

De acuerdo, al significado, como variable estudio desde Bruner:

• Respecto a la variable de significado implica el replanteamiento de una concepción de hombre al interior de la psicología cognitiva.
• No hay subcategoría que no implique alguna otra, todas están unidas en una red sistémica que hace que su interpretación inste a la intersección de diálogos.
• Todo significado tiene un recorrido, una vida pasada y reactualizada hacia el horizonte.
• De acuerdo a la interacción de las variables, tenemos que todo deseo esta contenido en un propósito, toda creencia es la base de un propósito, el deseo es para la creencia un acto simultaneo, reciproco un continuum inevitable.
• Los símbolos, los iconos y la experiencia suceden alternamente, de modo que todo símbolo tiene su icono, y ambos se expresan desde una perspectiva personal.
• La identidad personal es producto de la posición que los individuos tenemos frente al mundo y sus referentes culturales.
• La función del rol que cada institución asigna, sea la familiar o la educativa, generar procesos de cambios que se entremezclan con los propósitos personales que se han ido construyendo y reconstruyendo en el transcurso de la vida, pero definitivamente marcan la parte dialéctica de su cometido.
• Los actos de habla propuestos por Searle son una expresión actual de las auténticas implicaciones sobre el tema de las narrativas .

De acuerdo al tema referente a la ciudadanía:

• Las referencias en la ciudadanía se dan de manera dialéctica al momento de la concepción, pero luego se cierran en el beneficio local, o familiar imposibilitando esta realidad estructural una mejor proyección.
• La concepción liberal, tendencia mayormente marcada esta influenciada por las instituciones asistencialistas o comercializantes que hacen de las comunidades medios de explotacion.
• La vida en cada institución es como una burbuja que intenta constituirse en función a sí misma, pero esta escisión entre lo público y privado, no hace más que fragmentar los propósitos, que por bien logrados, solo tenderán al favorecimiento de un núcleo familiar.
• Al estilo de Gadamer, nos permite mostrarnos cómo las mismas condiciones estructurales son los espacios desde los cuales se pueden construir la idea de un hombre capaz de afrontar su vida.
• Los significados son construidos por las situaciones en que los actores sociales se percatan de su protagonismo,en cuya dinámica fagocitan las particularidades de los individuos y las lanzan desde una plataforma institucional hacia el horizonte.
• Los ciclos de la democracia se producen en una dialéctica entre localidad y nacionalidad, entre vida privada y vida pública.

• No existe una democracia en sí misma, esta es por condición humana un intercambio entre normativizaciones y participaciones que cuestionan las normas actuales para fundar unas nuevas.


Sobre el uso y manejo de las técnicas de investigación utilizadas:

Las narrativas configuran la idea que una persona tenga sobre el mundo al momento mismo de su construcción.
• La técnica de la narrativa, sin duda alguna, permite la espontaneidad del desarrollo del discurso del hablante de tal manera, que cuando crea su personaje le permite ir hacia el, y volverse a sí, a veces sin percatarse.
• El reconocimiento de la participación de un contexto historico permite comprender el marco de referencia que los significados tienen en los sujetos, pudiendo asi conocer de alguna forma el posible curso en su futuro, que sin buscar predecirlo, al menos las tendencias y las posibilidades se puedan reconocer. .


En relación al aporte teórico:

• El valor teórico de la variable y la antropovisión de hombre invita a realizar marcos de estudios cualitativos desde donde dicha variable tiene un sentido superior al de la operacionalización.
• Respecto a la construcción de marcos de referencia ideológicos, tenemos que resaltar que uno de los aspectos que fueron denotativos en la construcción de sus significados fue la tendencia de en encontrar en común el valor que sobre la educación todos tienen, poniendo en ella la potencialidad que desarrollará sus vidas personales y sus contextos sociales.
• Una vez superado el ideal, y vuelto a aterrizar en la convivencia cotidiana, el día a día muestra persistentemente que cada logro es desvanece con el tiempo, es así como la visión que Gadamer plantea sobre el horizonte está de modo latente en sus contextos culturales, pero la conciencia de que pueden hacer algo para cambiarlo es lo que falta para que se decidan a hacer de sus espacios, las mejores oportunidades para alcanzar lo que desean.
• Nuestros personajes muestran estas tendencias, la estructura sobre la que conviven pareciese a veces pesar sobre ellos, y no es para menos; aunque la visión constructivista se proponga como contradictoria de la estructural en su perspectiva determinista del mundo, no podemos negar que la una se convierte en condición de la otra.
[1] “(...) La sociedad civil es vista, entonces, como un gigante amordazado que despierta y en un mismo movimiento se libera de las cadenas de la opresión, estatal y construye un nuevo orden social”. LECHNER, Norbert. La problemática invocación de la sociedad civil. . Espacios n° 4, abril-mayo 1995. p. 26.
[2] LECHNER, Norbert. La problemática invocación de la sociedad civil.. Espacios n° 4, abril-mayo 1995 p. 26.
[3] “Los tres conceptos básicos de la teoría son: elementos cognitivos, implicación e incompatibilidad. Una cognición o un elemento cognitivo es <> (...) Dos elementos cognitivos pueden estar en relación de implicación cuando la presencia de la cognición A en el campo cognitivo de la persona debe verse acompañada por la presencia de la cognición B. (...) Dos cogniciones están, en cambio, en relación de incompatibilidad cuando una es contradictoria u opuesta a la otra”. MORALES, José Francisco. Psicología Social. Madrid: McGraw Hill. 1999. p. 235.
[4] “Una versión diferente del fatalismo latinoamericano atribuye este síndrome al desarrollo de unas pautas culturales necesarias en un momento para lograr la supervivencia, pero al reproducirse tienden a perpetuar aquellas mismas condiciones que las producen, generando un círculo vicioso. Se trata de la llamada <>”. MARTÍN-BARÓ. Psicología de la liberación. Madrid: Trotta. 1998. p. 87.
[5] “(...) lo político se define por el papel central que ocupa el Estado en la vida de las comunidades históricas, a condición, no obstante, de definir al Estado en su máxima extensión (...) Hablar de comunidad histórica es ubicarnos más allá de una moral simplemente formal, sin abandonar, como lo veremos más adelante, el terreno de la intención ética. En efecto, la identidad narrativa y simbólica de una comunidad se mantiene por el contenido de las costumbres, por normas aceptadas y simbolismos de toda clase. Con la expresión “comunidad histórica” o “pueblo”, pasamos del plano formal al plano concreto”. RICOEUR, Paul. Del texto a la acción: ensayos de hermenéutica II. México: Fondo de Cultura Económica. 2002. p. 366.
[6] RORTY, Richard. Pragmatismo y política. Barcelona: Paidós. 1998. P. 81-82.
[7] “La profunda ausencia del sentido de lo público permea la forma de proceder, el comportamiento y la conducta de los ciudadanos, privilegiando el interés individual sobre el llamado “bien común”, lo que, en otras cosas, reproduce la deslegitimidad y desinstitunalización del Estado, “el ente representativo del interés público” en una sociedad democrática, e incluso en otras sociedades bajo otros regímenes u ordenamientos políticos alternativos”. CAMACHO, Alvaro y LEAL, Francisco (Comp.) UN/Facultad de Ciencias Sociales. Armar la Paz es Desarmar la Guerra – Herramientas para Lograr la Paz. Bogotá: FESCOL / IEPRI / CEREC / IEPRI, FESCOL, CEREC. 1999. p. 404.
[8] “La politización de las masas debe entenderse como un efecto de la concientización y, como expresa Fernández Christlieb (...), consiste en tornar público lo que ha sido reprimido, privatizado. Politizar es, entonces hacer que la esfera pública se amplíe y que sea posible un diálogo político abierto, donde muchas voces sean oídas con igual respeto para todas”. MONTERO, Maritza. Teoría y práctica de la psicología comunitaria: la tensión entre comunidad y sociedad. Argentina. Paidos. 2003 p. 155.
[9] “La socialización designa el proceso en virtud del cual a los individuos se les enseñan las cualidades esenciales para funcionar de modo adecuado en la sociedad (Cottrel, 1969)” KIMBLE, Charles; HIRT, Edward; DÍAZ-LOVING, Rolando. Psicología social de las Américas. México: Prentince Hall. 2002. p. 469.
[10] “(...) La endoculturación se refiere al proceso de asimilar información indirectamente (influencia no intencional) por el mero hecho de formar parte de un grupo cultural o de estar rodeado por él (Herskovitz, 1948) (...)”. KIMBLE, Charles; HIRT, Edward; DÍAZ-LOVING, Rolando. Psicología social de las Américas. México: Prentince Hall. 2002. p. 470.
[11] ZUBIRÍA, Blas. Construyendo democracia a través de la veeduría ciudadana. . Texto de apoyo. Especialización en desarrollo social. Universidad del Norte. 2004
[12] “(...) No hay nada parecido a algo así como un seguro no político contra la política, no hay remedios exteriores en la acción contra los peligros inherentes de la acción. La acción es también imprevisible e irreversible. La imprevisibilidad no se debe solamente a la imposibilidad de predecir las consecuencias, sino también, y sobre todo, a que el sentido de la acción no se revela nada más que al final del proceso, no al actor, no a los actores, sino a los espectadores, al narrador, al historiador”. AMIEL, Anne. Hannah Arendt: política y acontecimiento. Buenos aires: nueva visión. 1996. P. 70
[13] LECHNER, Norbert. La problemática invocación de la sociedad civil. Espacios n° 4, abril-mayo 1995. p. 32-33.
[14] “(...) La acción no siempre hace la historia, pero <> la sociedad. Acción es producción, reproducción y comunicación; la acción crea poder y se opone al poder. Sin duda alguna, la acción es la forma fundamental de la existencia social del hombre. Nosotros vivimos con y bajo otros hombres, actuamos a favor y en contra de otros. Incluso cuando estamos solos tenemos en cuenta a los demás – desde los albores de la humanidad hasta los días actuales- una conexión de actos del prójimo”. LUCKMANN, Thomas. Teoría de la acción social. Barcelona: Paidós. 1996. p. 12.
[15] REYES, Francisco José. Elementos sobre cultura política democrática. Democracia y conflicto en la escuela. Republica de Colombia: ministerio de educación. Texto de apoyo. Especialización en desarrollo social. Universidad del Norte. 2004. p. 37.

Bibliografía

ALBERT, Hans. Razón crítica y práctica social. Barcelona: Paidós. 2002.
ALVARO, Jose Luis; GARRIDO, Alicia; TORREGOSA, J. Psicología social aplicada. Madrid: Mc Graw Hill. 1998.
AMAR, José; ABELLO, Raymundo; TIRADO, Diana. Desarrollo infantil y construcción del mundo social. Barranquilla: Uninorte. 2004.
AMAR AMAR, José. La Región Caribe y la hipótesis del retraso cultural. Texto inédito.
AMAR, José. Et al. La psicología: Profesión y disciplina científica. Santa Fé de Bogotá: Uninorte, 1995.
AMAR, José. El estado de bienestar: opción para América Latina. Texto inédito.
AMAR, José. Colombia. Cómo construir una buena sociedad. Texto inédito.
AMAR, José. Colombia. Las representaciones sociales de los conceptos económicos en niños que viven en contextos de pobreza. Uninorte: Barranquilla, 2002.
AMARIS, María. Inteligencias Múltiples. Psicología del Caribe: Identidad Nacional: una aproximación cognitiva. No. 10 Agosto - Diciembre. Barranquilla: Uninorte. 2002.
AMAYA PULIDO. Colombia, un país por construir. Problemas y retos presentes y futuros: Subsistema político. Bogotá, Universidad Nacional de Colombia, 2001.
AMIEL, Anne. Hannah Arendt: Política y acontecimiento. Buenos Aires: Nueva Visión. 1996.
ANDRADE ALVAREZ, José Joaquín. Reflexiones sobre formación integral: reflexiones entorno a la noción de formación integral. Revista Universidad del Norte. 1998.
ARCHILA, Mauricio; PARDO, Mauricio. Movimientos sociales, Estado y democracia en Colombia. Bogotá: Universidad Nacional de Colombia. 2001.
ARENDT, Hannah. Crisis de la república. Madrid: Taurus. 1998.
ARENDT, Hannah. La condición humana. Barcelona: Paidós. 1998.
BÁRCENA, Fernando. El oficio de la ciudadanía. Barcelona: Paidós. 1997.
BAYONA, Jesús Ferro. Visión de la universidad ante el siglo XXI. Barranquilla: Uninorte. 2000.
BLANCO, Amalio. Cinco tradiciones en la psicología social. Madrid: Morata. 1994.
BERGER, Peter. Introducción a la sociología. México: Limusa. 2003
BERGER, Peter. Los límites de la cohesión social: conflicto y mediación en las sociedades pluralistas. NNN Galaxia Gutenberg. 1999.
BERGER, Peter. LUCKMANN, Thomas. Modernidad, pluralismo y crisis de sentido. Barcelona: Piados Studio. 1995.
BERGER, Peter; LUCKMANN, Thomas. La construcción social de la realidad. Argentina: Amorrortu. 2001.
BLALOCK, Hubert. Introducción a la investigación social. Buenos Aires: Amorrortu. 1998.
BOBBIO, Norberto. El futuro de la democracia. México: Fondo de Cultura económica. 2000.
BORRERO, Armando. Democracia y conflicto. Democracia y conflicto en la escuela. Republica de Colombia: ministerio de educación.
BRUNER, Jerome. El habla del niño: Cognición y desarrollo humano. España: Piados. 1995.
BRUNER, Jerome. La fábrica de historias. Argentina: Fondo de Cultura Económica. 2003.
BRUNER, Jerome. El proceso mental en el aprendizaje. Madrid: Narcea s.a.
BRUNER, Jerome. Actos de Significado. Madrid: Alianza Psicología. 1991.
BRUNER, Jerome. Investigaciones sobre el desarrollo cognitivo. Madrid: Pablo Río. 1980
BRUNER, Jerome. La importancia de la educación. España: PaIdos. 1988.
BRUNER, Jerome. La educación puerta de la Cultura. Madrid: Visor Dis. 1997.
BRUNER, Jerome. Acción, pensamiento y lenguaje. Madrid: Alianza. 1984.
BRUNER, Jerome. Realidad mental y mundos posibles. España: Gedisa. 2001.
BUBER, Martín. Caminos de utopía. México: Fondo de cultura económica. 1992.
BUBER, Martin. Between Man and Man. Boston: Beacon Press,1955.
BUBER, Martin. ¿Qué es el hombre? Ciudad de México: Fondo de Cultura Económica, 1981.
BUBER, Martin. The Writings of Martin Buber. Nueva York: New American Library, 1974.
BUBER, Martín. Yo y Tú. New York: Charles Scribner’s Sons. 1970.
BUNGE, Mario. La ciencia, su método y su filosofía. Panamericana: Bogotá, 1996.
BUSHNELL, David. Colombia una nación a pesar de sí misma: de los tiempo precolombinos a nuestros días. Planeta: Bogotá. 1997.
CALDERA, Mireya. Para entender el subdesarrollo. Caracas: Monte Ávila. 1994
CALLE, Horacio. Papel de la influencia externa en la formación de la identidad colombiana. Papel de la influencia externa en la formación de la identidad colombiana. Bogotá: Universitas Humanística. NÚMERO: 46 PERÍODO: Julio/Diciembre 1997.
CANCLINI, N. Consumidores y Ciudadanos. Edit. Grijalbo. Mexico. D.F. 1995.
CASASBUENAS, Guillermo. Alcalde: además de gerente un líder. Texto de apoyo de la Especialización en Desarrollo Social. Universidad del Norte. 2003.
CASSIRER, Ernst. Filosofía de las formas simbólicas: Tomo III. México: Fondo de Cultura económica. 1998.
CELIS, Leonardo. JARABA, Bruno, MEBARAK, Moisés. Texto inédito SOBRE EL INTERES DE LA PSICOLOGÍA.. Bucaramanga, 2001.
CHAPARRO, Adolfo. Cultura política y perdón: Cap.: 14: Perdón y procesos de reconciliación. MELO, Orlando.
ROUX, Francisco. Cultura política y perdón: Texto de apoyo. Especialización en desarrollo social. Universidad del Norte. 2003.
CHRISTLIEB, Pablo Fernández. "Consideraciones teórico metodológicas de la psicología política", en Psicología política latinoamericana. Venezuela: Panapo. 1987
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE COLOMBIA. Actualizada. Medellín: Copyright. 1998.
CORDERO, Jasé Luis. El Desafío Latinoameñcano... y sus cinco grandes retos: Educación, Sociedad, Economía, Política y Ecología. Caracas: Mc Sr H/fl. 7995
CORREA, Alfredo. Aproximaciones a la teoría y a la práctica de la participación. Texto de apoyo de la Especialización en Desarrollo Social. Universidad del Norte. 2003.
CORREA, Alfredo. Una nueva cultura política: un caso de Presupuesto Participativo. Texto de Apoyo Especialización en Desarrollo Social.
DA SILVA, T.T. Cultura y Currículum como prácticas de significación. En Revista de Estudios del Curriculum, Edit. Pomares Corredor., Vol. 1. Núm. 1. 1998
Christlieb, Pablo. Consideraciones teórico – metodológicas sobre psicología política.
DE CASTRO, Alberto Mario. La psicología existencial de Rollo May. Barranquilla: Uninorte. 2000.
DELGADO, Juan Manuel; GUTIERREZ, Juan. Métodos y técnicas cualitativas de investigación en ciencias sociales.
DESCARTES, Rene. Discurso del Método. Losada: Buenos Aires. 1974.
DORNA, Alexander. La psicología política: una encrucijada pluridisciplinaria
DORIS, Lamus. La formación de Ciudadanos: Una necesidad Actual. En: Rev. Educación y Cultura. No. 26, Abril de 1992.
DURKHEIM, Emile. Educación y sociología. Texto de apoyo. Especialización en desarrollo social. Universidad del Norte. 2004.
ECHNER, Norbert. La problemática invocación de la sociedad civil. Espacios n° 4, abril-mayo 1995
FATONE, Vicente. Introducción al existencialismo. Buenos: Columbia, 1940.
FEUERBACH, Ludwig. Tesis provisionales para la reforma de la filosofía. principios de la filosofía del futuro. Barcelona: Orbis. 1984.
FLOREZ, Alonso; HOLGUÍN, Magdalena; MELÉNDEZ, Raúl. Del espejo a las herramientas: ensayos sobre el pensamiento de Wittgenstein. Bogotá: Siglo del hombre editores. 2003.
FORERO, Clemente. La planeación: un asunto ciudadano. Texto de Apoyo Especialización en Desarrollo Social.
FRANKL, Viktor. El hombre doliente. Barcelona: Herder, 1994.
FRANKL, Víctor. El hombre en busca de sentido. Barcelona: Herder, 1994.
FRANKL, Viktor. La voluntad de sentido. Barcelona: Herder, 1994.
FRANKL, Viktor. Psicoanálisis y existencialismo. Barcelona: Herder, 1994.
FROMM, Erich. Miedo a la libertad. Buenos Aires: Paidós, 1980.
FROMM, Erick. La revolución de la esperanza: hacia una tecnología deshumanizada. Fondo de Cultura Económica: México. 1982.
GADAMER, Hans-Georg. El inicio de la filosofía occidental. España: Paidós Studio. 1999.
MAGENDZO, Abraham. Curriculum, educación para la democracia en la modernidad. Programa interdisciplinario de investigaciones en educación -PIIE-. Santiago de Chiles. 1996.
GALINDO, Luis Jesús. Técnicas de investigación cultura y comunicación. México: Pearson Education. 1998.
GALLEGO-BADILLO, Rómulo. Discurso sobre constructivismo: nuevas estructuras conceptuales, metodológicas y actitudinales. Colombia: Magisterio. 2001
Galvez r., sandra lilia. Fenomenología hermenéutica para el análisis del lenguaje educativo ético en la obra narrativa: análisis de un filósofo de la educación. Texto de internet
CAMACHO, Alvaro y LEAL, Francisco (Comp.) UN/Facultad de Ciencias Sociales. Armar la Paz es Desarmar la Guerra – Herramientas para Lograr la Paz. Bogotá: FESCOL / IEPRI / CEREC / IEPRI, FESCOL, CEREC. 1999.
GARDNER, Howard. La Educación de la Mente y el Conocimiento de las disciplinas: Lo que todo estudiante debería Comprender. Paidos, Barcelona, 1999
GARDNER, Howard. Mentes extraordinarias: cuatro retratos para descubrir nuestra propia excepcionalidad. Barcelona: Kairós. 1999.
GARDNER, Howard. Mentes creativas. Una anatomía de la creatividad humana. Barcelona: Paidós. 1995.
GARDNER, Howard. La mente no escolarizada: cómo piensan los niños y cómo deberían enseñar las escuelas. Barcelona: Piados. 1997
GARDNER, Howard. La nueva ciencia de la mente: historia de la revolución cognitiva. Barcelona: Piados. 1996.
GARDNER, Howard. Inteligencias Múltiples: La teoría en la Práctica. Paidos.Barcelo, 1995.
GERGEN, Keneth. Realidades y relaciones: aproximaciones a la construcción social. Barcelona: Piados. 1996.
GERGEN. Keneth. El yo saturado: Dilemas de identidad en el mundo contemporáneo. México: Piados. 1992.
GIDDENS, Anthony. Un mundo desbocado: los efectos de la globalización en nuestras vidas. España: Taurus. 2000.
GIRALDO, Jaime. Metodología y técnica de la investigación bibliográfica. Bogotá: Universidad Externado de Colombia, 1979.
GONZALES, Fernán. Imágenes y reflexiones de la cultura en Colombia. Relaciones entre la cultura y política. Aproximación a los modelos culturales implícitos en nuestra percepción de la política.
GONZALEZ, Stella. Documento inédito de publicación Universidad del Norte.
Estudio introductorio. Texto de apoyo académico. Maestría en Desarrollo Social. Universidad del Norte: Barranquilla. 2004.
HABERMAS, Jürgen. Tomado de revista. Ideas y Valores. Universidad nacional. Bogotá. 1978.
HABERMAS, Jürgen. Conocimiento e interés. Revista Ideas y valores. Traducción de Guillermo Hoyos. Comunicación social. Universidad Nacional, 1978.
HEGEL, Georg Wilhelm. Lecciones sobre la filosofía de la historia univesal. Alianza: Madrid. 1980.
HORKHEIMER, Max. Crítica de la razón instrumental. Madrid: Trotta. 2002.
HOYOS, Guillermo. Ética para ciudadanos.
HOYOS, Olga. Psicología del Caribe: Identidad Nacional: una aproximación cognitiva. No. 8 Julio – Diciembre. Barranquilla: Uninorte. 2001.
IBAÑEZ, Tomás. La dimensión política de la psicología social. Revista latinoamericana de psicología: Vol. 25 No. 1. 1993.
Informe sobre desarrollo humano 2004: La libertad cultural en el mundo diverso de hoy. Barcelona: Mundi-Prensa. 2004.
JASPERS, Karl. Iniciación al método filosófico. Madrid: Espasa-Calpe, 1977.
JASPERS, Karl. Razón y Existencia. Buenos Aires: Nova, 1935.
JASPERS, Karl. La filosofía desde el punto de vista de la existencia. Fondo de Cultura Económica: México, 1978.
KANT, Enmanuel. Fragmentos seleccionados por Jorge Villalón Texto de apoyo. Especialización en desarrollo social. Universidad del Norte. 2004..
KANT, Enmanuel citado por VILLALON, Jorge. Desarrollo social, desarrollo humano: ¿la última utopía de la época moderna? Ensayo presentado en el Congreso sobre Desarrollo Humano de Mayo de 1998 en Barranquilla.
KEPP, Michael. Curitiva, Brasil: Planeación participativa. Texto de apoyo de la Especialización en Desarrollo Social. Universidad del Norte. 2003.
KIMBLE, Charles; HIRT, Edward; DÍAZ-LOVING, Rolando. Psicología social de las Américas. México: Prentince Hall. 2002.
KYMLICKA, W. y WAYNE, N. El retorno del ciudadano, Una revisión de la producción reciente en teoría de la ciudadanía. En Cuadernos del CLAEH, nº 75, Montevideo. 1996. p. 80-112.
LAING, R. D. El yo Dividido. España: Fondo de Cultura Económica, 1994.
LECHNER, Norbert. La problemática invocación de la sociedad civil. Espacios n° 4, abril-mayo 1995. 2003.
LEY GENERAL DE LA EDUCACIÓN. Bogotá: Caasim. 2000.
LUCKMANN, Thomas. Teoría de la acción social. Barcelona: Paidós. 1996.
LUNA, Arturo. Logoterapia: Un enfoque humanista existencial. Santafe de Bogotá D.C. : San Pablo, 1996.
MANDA, Serena. Antropología cultural: adaptaciones socioculturales. México: Grupo Editorial Iberoamérica. 1980.
MARDONES, J. M. Filosofía de las ciencias humanas y sociales: materiales para una fundamentación científica. Barcelona: Anthropos. 2001.
MARTÍN-BARÓ, Ignacio. Anuario Científico. Universidad del Norte. Barranquilla (Colombia), VII: 159-178, 1988.
MARTÍN-BARÓ. Poder, ideología y violencia. Madrid: Trotta. 2003.
MARTÍN-BARÓ. Psicología de la liberación. Madrid: Trotta. 1998.
MARTINEZ, Alberto y Otros. Crónica del desarraigo. Educación y cultura. Fecode. Santa Fé de Bogotá. 1988
MARTINIC, S. Principios culturales de la demanda social por educación. Un análisis estructural. En Revista Pensamiento Educativo, Vol 16. 1995.
MARX, Karl. Contribución a la crítica de la economía política. Londres 1859. Fragmentos seleccionados por Jorge Villalón.
MATURANA, Humberto. La realidad: ¿objetiva o construida?. Barcelona: Anthropos. 1995.
MATURANA, Humberto; VARELA, Francisco. El árbol del conocimiento: las bases biológicas del conocimiento humano. Madrid: Debate.1996.
MAY, Rollo. Amor y Voluntad. México: Gedisa, 1990.
MAY, Rollo. El hombre en busca de sí mismo. Buenos aires: Fausto, 1996.
MAY, Rollo. La necesidad del mito. Barcelona: Paidós, 1992.
MAY, Rollo. La psicología y el dilema del hombre. Barcelona: Gedisa, 1990.
MAY, Rollo. Libertad y destino en psicoterapia. Bilbao: Desclee de Brouwer, 1988
MAY, Rollo. et. Al. Psicología Existencial. Buenos aires: Paidós, 1963.
MCCARTHY, Thomas. La Teoría Crítica de Jürgen Habermas de. Madrid: Tecnos: Madrid. 1997.
MIRALLES, Ana María. ¿Qué es el periodismo cívico? Texto de apoyo. Especialización en desarrollo social. Universidad del Norte. 2004
MONTERO, Maritza. Psicología política latinoamericana. Caracas: Panapo. 1987. MONTERO, Maritza. Teoría y práctica de la psicología comunitaria: la tensión entre comunidad y sociedad. Argentina. Paidos. 2003
MORA, Ferrater. Diccionario Filosófico. Barcelona: Ariel, 1994.
MORALES, J. Francisco. Psicología social. Madrid: Mc Graw Hill. 1996.
MORALES, José Francisco. Psicología Social. Madrid: McGraw Hill. 1999.
MOUSTAKAS, Clark. Phenomenological Research Methods. California: Sage, 1994.
MOUSTAKAS, Clark. Ser y Cuidado. Traducción por Heydie Racedo. Barranquilla: Uninorte, 1998.
OSORIO, J. Ciudadanía y posibilidades de una educación del sentido común. En Revista La Piragua. CEAl. Pri. Sem.Núm. 10. 1995
SEONE, J. y RODRIGUEZ, A. Psicología Política. Madrid: Pirámide. 1988.
MURCIA, Jorge. Investigar para cambiar: un enfoque sobre investigación acción participante. Santafé de Bogotá: Magisterio. 1992.
PARIAT, Marcet GOUTET, Marie. Educación, Formación y Desarrollo. Formación y Desarrollo Social. Barranquilla: Ediciones Uninorte. 1995.
PÈREZ - EMBID, Florentino. Forjadores del mundo contemporáneo : Tomo IV. Barcelona: Planeta. 1970.
PERLMAN, D; COZBY, P. Psicología social. México: Interamericana. 1988.
PRIMER CONGRESO NACIONAL UNIVERSITARIO POR LA PAZ: TOMO II. Santafé de Bogotá D.C., 12, 13 y 14 de mayo de 1999.: Democracia, resolución de conflictos y cultura de paz: Gabriel Izquierdo Maldonado.
RESTREPO, Dario. El caliz de la participación: relaciones estado-sociedad civil en el campo social una reflexión desde el caso colombiano. Texto de Apoyo Especialización en Desarrollo Social.
RESTREPO, Luis Carlos. En torno a la convivencia. Texto de apoyo. Especialización en desarrollo social. Universidad del Norte. 2004.
RESTREPO, Luis Carlos. Proyecto de un arca para un diluvio de plomo. Arango. 1997.
REYES, Francisco José. Elementos sobre cultura política democrática. Democracia y conflicto en la escuela. Republica de Colombia: ministerio de educación.
REYES, T, Francisco. Democracia y Conflicto en la Escuela, Colombia: Instituto para el Desarrollo de la Democracia. Bogota: Reygadas. 1989.
RICOEUR, Paul. Del texto a la acción: ensayos de hermenéutica II. México: Fondo de Cultura Económica. 2002.
ROA, Hernando. Estado y Gobernabilidad. Texto de apoyo de la Especialización en Desarrollo Social. Universidad del Norte. 2003.
ROGERS, Carl. Libertad y creatividad en la educación. Barcelona: Paidos. 1982
ROJAS DE FERRO, Maria Cristina. La formación de la identidad Nacional en la Colombia de mediados del siglo XIX. Bogotá: Universitas Humanística. No. 46, Año XXVI, Julio-Diciembre de 1997.
RORTY, Richard. El giro lingüístico. Barcelona: Paidós. 1998.
RORTY, Richard. Pragmatismo y política. Barcelona: Paidós. 1998.
ROUBIZECK, Paul. Hacia el existencialismo. Buenos Aires: Trillas.1979.
ROUSSEAU. Contrato Social. Santa fe de Bogotá: Panamericana. 1996.
SABUCEDO, J. M. Cap. 1: Psicología política y cambio social.
SAEZ, Vladimiro. Gestion publica y participación ciudadana. Texto de Apoyo Especialización en Desarrollo Social.
SAMPIERI, Roberto; FERNÁNDEZ, Carlos; BAPTISTA, Pilar. Metodología de la investigación. México: McGraw Hill. 2001.
SÁNCHEZ M, Diego. Martin Buber: Fundamento existencial. Barcelona: Herder. 1984
SÁNCHEZ, José. Psicología de los grupos: teorías, procesos y aplicaciones. Madrid: McGraw Hill. 2002.
SARABIA, Arturo, Serie memorias. Un año de cambio en la educación colombiana. Ministerio de educación nacional. Bogotá. 1995
SARTRE, Jean Paul. El existencialismo es un humanismo. Barcelona: Orbis, 1985.
SAUSSURE, Ferdinand de. Curso de lingüística general. Buenos Aires, Losada. 1961
SAVATER, Fernando. Las preguntas de la vida. Barcelona: Ariel, 1999.
SCHAFF, Adam. Lenguaje y Conocimiento. Editorial Grijalbo, S.A.. Mexico, D.P. 1975
SCHUTZ, Alfred. La construcción significativa del mundo social. España: Paidós. 1993.
SEARLE, John. Actos de habla. Madrid: Cátedra. 2001.
SEONE, Julio. Cap. 1: Concepto de psicología política.
SPEIER, Anny. Psicoterapia de grupo en la adolescencia. Buenos Aires: Nueva visión, 1977.
THOMAS, Florence. Relaciones de género: la primera de la convivencia.
TORRES, Lina. Ciencias sociales: sociedad y cultura contemporáneas. México: Thomson learning. 2001.
TOYNBE, Arnold. Estudio de historia. Emece: Buenos Aires. 1953.
TURBAY, Marco y DURAN, Valerie. Revisión Bibliográfico analítica de los aportes de la obra de Martin Buber en relación con los conceptos yo-tu, yo-ello, en la obra de Viktor Emil Frankl. Monografía de Grado. Universidad del Norte. 2001.
TURBAY, Marco. POLO, Jean. Investigación socio – educativa. Documento Inédito.
VALENZUELA, Pedro. Estructura del conflicto y su resolución. En "Convivir. Una experiencia con comunidad educativa". Derechos reservados Instituto Para el Desarrollo de la Democracia Luis Carlos Galán. 1996.
VARELA, Edgar. Nuevas fronteras entre lo público y lo privado. Texto de apoyo de la Especialización en Desarrollo Social. Universidad del Norte. 2003.
VAN GUSTEREN, Herman. Notes towards a Theory of Citizenship. en F. Dallmayr (com.), From Contract to Community, Nueva York, Marcel Decker. 1978
VARGAS, Alejo. Violencias entrecruzadas y su mutua retroalimentación. Universidad Nacional. Facultad de derecho, ciencias políticas y sociales. 2001.
VARGAS, Maritza. Participación social: una mirada crítica.
VILLALON, Jorge. Desarrollo social, desarrollo humano: ¿la última utopía de la época moderna? Ensayo presentado en el Congreso sobre Desarrollo Humano de Mayo de 1998 en Barranquilla.
WEBER, Max (1919): La política como vocación http://www.copmadrid.org/pspolitica/Weber.doc
WEBER, Max. Estructuras de poder. México: Coyoacán. 2001.
YALOM, Irvin. Psicoterapia Existencial. Barcelona: Herder, 1980.
ZAMBRANO, Fabio. Cultura e Identidad Nacional. Una Mirada desde la Historia. En: Revista Nómadas, No. 1. Bogotá, Universidad Central, 1994
ZAMBRANO, Fabio. Imágenes y reflexiones de la cultura en Colombia: Región, Nación e identidad cultural. Bogotá: Colcultura. 1991.
ZUBIRÍA, Blas. Construyendo democracia a través de la veeduría ciudadana.
ZUBIRÍA, Blas. Veeduría ciudadana: estrategia de participación para el control social de la gestión. Texto de apoyo. Cátedra Alfredo Correa.
ZULETA, Estanislao. Democracia y participación en Colombia. Texto de apoyo de la Especialización en Desarrollo Social. Universidad del Norte. 2003.

Internet:

http://debateeducativo.mec.es/pdf/d1.pdf: Ministerio y educación de ciencia. Los valores y la formación ciudadana.
http://www.monografias.com/trabajos15/psicologia-politica/psicologia-politica.shtml#QUEES¿Qué es la psicología política?
http://utal.org/movimiento/11c.htm#4
http://www.abacolombia.org.co/areas/social/artpol6.htm
http://www.monografias.com/trabajos5/codetic/codetic.shtml
http://www.uv.mx/iip/materiales/sem_mm1/%2014%20Rol%20y%20formaci%F3n%20del%20Psicologo%20Comunitario.doc
http://www.uv.mx/iip/materiales/sem_mm1/%206%20Modelos%20teoricos%20en%20Psicolog%EDa%20Comunitaria.doc
http://www.swarthmore.edu/SocSci/kgergen1/web/page.phtml?id=manu18&st=manuscripts&hf=1
http://www.ucm.es/info/eurotheo/nomadas/
http://www.campus-oie.org/oeivirt/rie18a05.htm
http://www.ucm.es/info/eurotheo/nomadas/
http://www.ucm.es/info/eurotheo/nomadas/
http://www.ucm.es/info/eurotheo/diccionario/P/politicas_publicas_a.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Pol%EDticas_p%FAblicas
http://www.plataforma.uchile.cl/fg/semestre2/_2003/estado/modulo3/clase4/texto/polit.htm
http://www.monografias.com/trabajos15/poder-ciudadano/poder-ciudadano.shtml
http://www.acepweb.org.ar/ACEPFormacion/_documentos/Modulo%20III/4%20Documento%20%20-%20Cap%C3%ADtulo%20Unico.doc
www.vc.ehu.es/campus/centros/e.g.b./deptos-e/zona1/apuntes/psieducacion/bruner.htm
http://www.lafacu.com/apuntes/psicologia/Teoria_de_educacion_Brumer/default.htm
http://www.unesco.cl/pdf/publicac/casassus_cambios.pdf Cambios paradigmáticos en educación. PALACIOS, Jesús. Jerome S. Bruner: una teoría de la educación.
http://www.mineducacion.gov.co
http://debateeducativo.mec.es/pdf/d1.pdf: Ministerio y educación de ciencia. Los valores y la formación ciudadana.
www.vc.ehu.es/campus/centros/e.g.b./deptos-e/zona1/apuntes/psieducacion/bruner.htm
www.vc.ehu.es/campus/centros/e.g.b./deptos-e/zona1/apuntes/psieducacion/bruner.htm
http://www.abacolombia.org.co/areas/social/artpol6.htm
http://rehue.csociales.uchile.cl/publicaciones/moebio/04/frames03.htm:
http://www2.uah.es/estudios_de_organizacion/epistemologia/filosofia_analitica.htm
www.pignc-ispi.com/articles/education/chadwick-psicologia.htm
http://www.vc.ehu.es/campus/centros/e.g.b./deptos-e/deppe/zona1/apuntes/psieducacion/bruner.htm
http://www.swarthmore.edu/SocSci/kgergen1/web/page.phtml?id=manu18&st=manuscripts&hf=1
http://www.swarthmore.edu/SocSci/kgergen1/web/page.phtml?id=manu18&st=manuscripts&hf=1
www.vc.ehu.es/campus/centros/e.g.b./deptos-e/zona1/apuntes/psieducacion/bruner.htm
www.vc.ehu.es/campus/centros/e.g.b./deptos-e/zona1/apuntes/psieducacion/bruner.htm
http://www.copmadrid.org/pspolitica/Weber.doc WEBER, Max (1919): La política como vocación
http://www.mineducacion.gov.co. Decreto 1860 de la Ley 115.
http://www.mineducacion.gov.co. Ley 749 de Julio 19 de 2002
http://www.mineducacion.gov.coLey 715 de Diciembre 21 de 2001
http://debateeducativo.mec.es/pdf/d1.pdf: Ministerio y educación de ciencia. Los valores y la formación ciudadana.
http://www.iigov.org/dhial/?p=40_07MAZZINA, Constanza. La importancia de la formación ciudadana.
http://www.ucm.es/info/eurotheo/diccionario/P/politicas_publicas_a.htm
http://www.plataforma.uchile.cl/fg/semestre2/_2003/estado/modulo3/clase4/texto/polit.htm
http://www.monografias.com/trabajos15/poder-ciudadano/poder-ciudadano.shtml
http://www.acepweb.org.ar/ACEPFormacion/_documentos/Modulo%20III/4%20Documento%20%20-%20Cap%C3%ADtulo%20Unico.doc
http://www.lafacu.com/apuntes/psicologia/Teoria_de_educacion_Brumer/default.htm
http://www.iigov.org/dhial/?p=40_07 MAZZINA, Constanza. La importancia de la formación ciudadana.

No hay comentarios: